Sancti Spíritus fue el conjunto más afectado con la estampida de doce jugadores del equipo Cuba que participó en la Copa Mundial Sub-23 de béisbol, efectuada entre septiembre y octubre de 2021, en México. Los yayaberos que decidieron no regresar a su país fueron, por este orden, el lanzador Luis Dannys Morales, el receptor Loidel Rodríguez, el inicialista Dismany Palacios y el jardinero Geisel Cepeda, el último de la docena.
Unido a esas cuatro bajas, los Gallos tampoco contarán para la próxima Serie Nacional, prevista para empezar el 23 de enero, con dos de sus principales cartas desde el montículo: el zurdo Yamichel Pérez, ahora miembro de los Cocodrilos de Matanzas, y el diestro Pedro Álvarez, integrante en la actualidad del plantel habanero de Industriales.
Pero ahí no termina el calvario para el cuerpo monticular del equipo dirigido por Eriel Sánchez. Aunque no ha trascendido, hace pocos días perdieron a un efectivo del que se esperaban buenas actuaciones en un futuro cercano.
De acuerdo a una fuente consultada por Cubalite, el primero de enero llegó a Estados Unidos, de manera legal, el serpentinero zurdo Edelso Montesinos, gracias a que su madre reside en la nación norteamericana.
Natural del municipio de Cabaiguán, trabajó en las Series 58 y 59, y entre ambas registró dos victorias, par de fracasos, 16 partidos lanzados —siete como abridor—, 31 ponches, 24 boletos, le batearon .291, permitió seis extrabases y mostró efectividad de 5.25. Tuvo actuación en un choque en la postemporada de su primera contienda.
El jugador de 21 almanaques se perdió la edición 60 debido a una operación en el hombro de su brazo de lanzar, la cual lo mantuvo alrededor de dos años alejado de los terrenos. No obstante, al parecer mostró signos de recuperación en los últimos meses, toda vez que fue incluido en la prenómina de los Gallos con vistas al campeonato venidero.
Edelso fue uno de los principales responsables en el título de Sancti Spíritus en el último Campeonato Nacional Sub-23, celebrado en 2019. En la barrida propinada por su novena a Cienfuegos en la final, abrió el tercer y decisivo compromiso, con labor de 112 envíos en ocho capítulos, sin carreras permitidas, con cuatro hits y nueve ponches.
A la postre fue elegido como el Jugador Más Valioso de los playoffs.
Al año siguiente fue uno de los doce yayaberos llamados a conformar el Centro de Entrenamiento 2020-2024, estrategia nacional para el desarrollo del béisbol en la Isla que tuvo como base a 116 jóvenes talentos.
En el Campeonato Nacional juvenil de 2018 se incluyó entre los mejores pitchers. Consiguió balance de ocho éxitos y par de reveses, con promedio de carreras limpias de 0.79, doce choques trabajados y siete completados, seis lechadas y 90 outs por la vía de los strikes en 68.1 innings. Igualmente consiguió un partido de cero hit, cero carrera frente a Camagüey.
Posteriormente, en ese torneo, reforzó a Santiago de Cuba en la final.
Gracias a su rendimiento en la justa y luego en la preselección, logró un puesto en el elenco nacional que concursó, en noviembre de 2018, en el Panamericano de la categoría desarrollado en Panamá.
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