El fenómeno de la edad en el deporte ha ido cambiando favorablemente en los últimos años. Las mejoras en las técnicas y medios de entrenamiento, así como los adelantos en el campo de la medicina y la nutrición, entre otros factores, han logrado que la vida en activo de los atletas, en algunas especialidades, se extienda más allá de los 35 años con bastante regularidad.
Kleyvert Rodríguez Cueto es uno de esos peloteros que parece estar viviendo una especie de segunda juventud hace más de una década. El habanero, oriundo del municipio Arroyo Naranjo, tiene 45 años y marcha muy bien en la presente temporada con el Cagliari de la Serie A1 de Italia.
Actualmente, este jugador de cuadro -también se ha desempañado como pitcher en otras temporadas-, quien batea y lanza a la derecha, acumula 23 hits en 62 turnos, con un promedio ofensivo de .371, cuatro dobles, un triple, 15 empujadas, 15 anotadas, slugging de .468, promedio de embasado de .458 y OPS de .926, además de nueve boletos y solo un ponche.
Gracias a este rendimiento, ha podido ayudar a que el Cagliari marche rumbo a la permanencia de cara al próximo curso. En este momento, el club tiene récord de nueve triunfos y cinco derrotas y se halla empatado con el Poviglio en la primera posición de la llave H de los grupos de salvación. Antes, en la primera vuelta del campeonato, finalizaron quintos del apartado E con marca de 5-5, lo cual los alejó del scudetto y los forzó a jugarse una permanencia que a estas alturas parecen tener asegurada.
Rodríguez ha jugado varias campañas en la península de la bota, en distintos niveles del béisbol en ese país. Catorce años después de su llegada allá, se mantiene activo y aportando mucho a su conjunto.
“Le preguntaron sobre el tema a Gabriele Ebau, capitán de mi equipo, y en modo de broma dijo que mi carta de identidad está mal, porque le parece imposible que yo con 45 años juegue al nivel que lo estoy haciendo. Y sí, la verdad es que físicamente estoy bien, me siento como un tren. Laboro haciendo ejercicio con ancianos y otras personas, así que me mantengo en forma. También hago pesas semanalmente y eso complementa la preparación”, relató Kleyvert a Cubalite.
Añadió que este año no pensaba jugar, pues empezó en un nuevo trabajo en el que le va bien en materia económica, pero recibió una llamada de Walter Angioi, manager del conjunto, quien le preguntó qué pensaba hacer. Llevaba dos años sin disputar partidos en la principal liga: en la anterior contienda estuvo en la Serie C y previamente participó en la B.
Le comentó al timonel que iría a los juegos cuando pudiera y que, si este entendía que en algún partido él podría salir a ayudar, pues que entonces lo pusiera. En la primera vuelta, de diez choques solo participó en tres, pero luego el entrenador principal le explicó que necesitaba su presencia, pues cuando él estaba el equipo jugaba distinto.
“Aquí estoy, no me pagan nada, me reembolsan solo lo que gasté para llegar a los juegos. Me va bien así, estoy tranquilo y eso es lo más importante para mí en este momento de mi vida. Es la primera vez que juego sin presión ninguna, sin pensar que el béisbol es la comida de mis hijos. Simplemente voy a jugar porque me divierto y ya”, sentenció el capitalino.
Rodríguez vive en Nuoro con su familia. Allí trabaja como monitor de gimnasia en un centro multifuncional, mientras en una granja educativa es monitor de aquagym. Viaja con frecuencia desde su cuidad hasta Cagliari para jugar en el estadio del club, pues en el lugar donde reside no tiene un terreno de beisbol que le permita entrenar con todas las condiciones.
Además de su rol como atleta, ha trabajado como agente para la Phoenix Sports Agency, empresa en donde ha colaborado con el exlanzador Yadel Martí para buscar talento en Europa, hacerlo llegar a Estados Unidos y probarse en diferentes niveles del principal centro beisbolero del mundo.
En paralelo a su carrera como atleta y agente, según refleja en su perfil de Facebook, ha sido entrenador del club SSD Nuoro Softball (2009-2015) e impartió sus conocimientos en la Academia Regional de Beisbol de Cerdeña.
Durante su etapa en categorías inferiores en Cuba, Kleyvert tuvo excelentes números, pero una lesión en el codo lo apartó del camino que lo hubiera llevado, al menos, a debutar en Series Nacionales.
En 1997 ingresó en la Universidad de las Ciencias de la Cultura Física y el Deporte “Manuel Fajardo” y al graduarse en 2002 se quedó como profesor de la cátedra de softbol. Tras varios años impartiendo clases, en 2009 se marchó a Italia, país en el que reside desde entonces. Su última participación en Cuba fue en 2017, cuando vio acción en la serie provincial con el plantel de su municipio.
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Soy de Arroyo y me acuerdo de el y del empeno de su Padre en su formation eso le falto Articulo Suerte y Salud