La carrera humorística de Leonardo Santiesteban comenzó en los años 80 en su natal Holguín, pero no fue hasta varios años después que empezó a tomar el rumbo que lo llevaría a convertirse en uno de los comediantes más conocidos del país. Por entonces, se unió con Reuel Remedios, quien también había estado en otro grupo antes, y ambos formaron el dueto Los Drakus.
En el 95 ambos se ganaron el reconocimiento de sus colegas del gremio, gracias a su desempeño en el Festival Aquelarre. A continuación, recibieron la ayuda de profesores del Instituto Superior de Arte, quienes les permitieron superarse y dar el salto de calidad necesario para la nueva etapa que venía.
El debut de ambos en la pantalla sucedió a principios los 2000 con un sketch que presentaron en Y tú de qué te ríes, espacio veraniego en donde se presentaron varios cómicos que, igual que ellos, se volverían bastante famosos eventualmente.
Pepitín fue el primer personaje que conocimos de Leonardo. Aquel niño de voz chillona, capaz de sacarnos carcajadas con sus maldades y comentarios, pronto le robó el nombre al comediante y, aunque su relevancia nunca significó que dejara Los Drakus, sí lo llevó a hacer carrera de forma independiente en varios otros programas, como aquellos del sábado en la noche, que hace años desaparecieron.
Luego de esa etapa, por 2004 descubrimos a su segundo alter ego: Maraca, un anciano que aparecía en el taller de Deja que yo te cuente y cuya inmediata popularidad lo llevó a cambiar nuevamente de “nombre” entre el público, que desde entonces comenzó a llamarlo por ese apelativo.
“Maraca es un homenaje a un gran amigo, viejo amigo o amigo viejo, Belisario González. Él fue quien me ‘empujó’ con sus consejos de luz larga a venir a la capital del país. Veía en mí talento y me decía que Holguín me quedaba chiquito. Por eso siento que es mi responsabilidad como amigo y actor cuidar como trofeo ese personaje, que tantas cosas aún le faltan por hacer, a él y a mí”, declaró en 2021.
“En lo personal, es un reto que un personaje no se me parezca en nada al otro. Soy muy cuidadoso con eso, aunque de alguna manera pueda aparecer algún que otro rasgo común, pues soy el mismo actor. No obstante, me siento muy satisfecho cuando me dicen que uno no se parece al otro; de ahí nace la idea de hacer primero el niño (Pepitín) y luego Maraca, para que se pueda distinguir la distancia entre uno y otro”, agregó en esa misma entrevista.
Otro de los roles que creó fue el de Koqui, un maquillista amanerado que vimos en el show televisivo El motor de arranque.
De lo último que hizo Santiesteban antes de irse definitivamente de Cuba fue el programa El atracón. Luego de eso, se supo que había llegado a finales de 2022 a Estados Unidos, país que había visitado anteriormente para actuar, entre otros lugares, en el programa TN3 que conduce Carlos Otero en el canal AmericaTV.
Desde que se estableció en la Florida, Leonardo ha estado bastante ocupado trabajando para varios espacios de diferentes plataformas online. Al poco tiempo de su arribo, fue “fichado” por el canal UnivistaTV, que propone contenidos variados para el público cubano y latino.
También ha tenido la oportunidad de aparecer en el show La Habana en Hialeah y también en la versión miamense del popular espacio Pateando la lata, el cual está siendo producido actualmente para el canal Alpairo TV.
Como parte del catálogo de la plataforma de streaming Pronyr TV, el holguinero participó en la comedia Welcome to la yuma, en donde compartió escena con otros colegas como Andy Vázquez, Yerlín Pérez, Rachel Cruz, Felito Lahera, Zulema Cruz, Erdwin Fernández y Ramoncitín Veloz, entre otros .
El próximo trabajo en el que le veremos será la serie Guajiras, serie de la propia Pronyr TV, que será protagonizada por Yerlín Pérez y Gelliset Valdés, quienes fueron compañeras de Santiesteban en Deja que yo te cuente.
Otro de los sucesos recientes que lo involucraron tuvo que ver con un video que publicó como Maraca en su cuenta de TikTok. En ese clip, el personaje manifestó sus deseos de virar para Cuba y esto hizo que él recibiera muchos comentarios fuera de lugar por parte de personas que él calificó de “imbéciles”, por no ser capaces de entender la diferencia entre lo que dice un personaje ficticio y los pensamientos de una persona real.
Además de los variados proyectos en los que se ha involucrado estos últimos dos años, Leonardo crea bastante contenido para sus perfiles en Youtube, Facebook, Instagram y TikTok.
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