En las últimas horas, según nos dijo una fuente cercana al equipo de Villa Clara, uno de los receptores de esa escuadra, Jesús Daniel Olivera León, ha salido de Cuba. Pese a que en la actual justa solo contaba con dos veces al bate y un hit, el joven, que hace tres días cumplió 24 años, era considerado por muchos aficionados y especialistas como uno de los peloteros con mejores perspectivas dentro de la provincia.
No obstante, su recorrido por los diamantes beisboleros no ha sido el que él hubiese esperado. Poco antes de convertirse en el mejor cátcher defensivo en un Panamericano Juvenil, celebrado en Venezuela, llegó a la mira de varios técnicos en categorías inferiores, pero luego, en certámenes sub 23, algunas decisiones no lo beneficiaron en lo absoluto.
En el torneo de 2017, su elenco ancló en un excelente segundo puesto y Jesús fue una de las figuras más destacadas a la ofensiva: bateó para .354 (23 hits en 65 turnos), con dos dobles, tres jonrones, OBP de .397 y 17 empujadas. Un año más tarde, el combinado central descendió hasta el penúltimo escaño, pero Olivera volvió a sobresalir con el madero, a pesar de participar en menos partidos. En ambos certámenes jugó más en la inicial que detrás de home y coincidió con Ariel Pestano Jr, hijo del mítico receptor, quien en ese entonces fungía como manager del equipo.
Por aquel momento fue bastante comentado, sobre todo en redes sociales, el poco juego que recibía el oriundo de Remedios, cansado de demostrar que no era segundo de nadie con el bate al hombro ni con la mascota. Sobre dicha polémica habló también el mentor, el cual, como publicamos en un material hace tres años, “compareció ante los micrófonos de la emisora local CMHW y sus palabras llevaron dinamita.
“Dijo que tanto su hijo como Olivera eran peloteros en ascenso y reconoció el potencial ofensivo del segundo. No obstante, más adelante aseguró que su descendiente era más atleta que Jesús Daniel, toda vez que se mostraba más funcional en el terreno”. Añadió, además, que su primogénito “batea a las dos manos, domina mejor la mascota y la receptoría, tiene más movilidad, más alcance, y se puede utilizar en diferentes áreas de juego”. También se refirió a algunas disciplinas que habría cometido el remediano, las cuales lo alejaban de la titularidad.
Luego de aquella historia se fue a Matanzas con el objetivo de jugar más y conseguir la regularidad que se le venía negando desde hacía algún tiempo. Les contamos que, en sus primeras tres campañas en Series Nacionales (2016-2017, 2017-2018 y 2018-2019, todas con Villa Clara), había disputado 17 partidos, en los que solo reunió 16 veces al bate, pegó dos hits, anotó igual número de carreras, se ponchó en siete oportunidades y recibió un solo boleto. Inauguró su palmarés en la primera categoría con el subcampeonato conseguido por los Leopardos en el último de esos tres cursos.
Con los Cocodrilos su suerte no mejoró: participó en 30 choques y conectó tres imparables en 27 turnos (average de .111), empujó tres anotaciones, fue retirado por la vía de los tres strikes en ocho ocasiones y le regalaron ocho pasaportes. Levantó el título con los yumurinos en el único torneo que jugó con ellos (2019-2020).
Volvió a su provincia natal para la Serie 60 y la situación fue similar: pocas chances y débil bateo. En la 61, con Julio Miranda y Pestano Jr alternando tras el plato, la situación no parecía mejorar para él.
Dejó los principales torneos beisboleros cubanos con cifras que, de acuerdo a lo que prometía, pudieron haber sido mucho mejores: en cinco contiendas antes de la actual, con muy pocas posibilidades de mostrarse al bate (7 hits en 63 turnos oficiales), su línea ofensiva era demasiado pobre (.111/.222/.127), solo había pegado un doble como extrabase, se había tomado 22 ponches y había recibido nueve bases por bolas. Nunca tuvo más de 33 comparecencias ante el home plate en una temporada. Nunca pudo explotar el talento que lo hizo destacar en etapas anteriores.
Hace falta que se respeten cuando den una opinión de la calidad de un atleta decir que no tiene calidad no es ofender a nadie es decir la verdad ese muchacho no tiene calidad como pelotero no ha demostrado nada ni en Villa Clara ni en matanzas yo doy esta opinión porque ahora todo el que se va de cuba es prospecto o tiene tremendo futuro
De acuerdo 100%. Pestano cuando no pudo ser regular porq estaba la rosa en VC se fue a otra provincia y lo hizo bien. Este muchacho se fue a matanzas y que demostró allí nada y ahora dudo mucho en EEUU pueda hacerlo