Elaín Morales: de triunfar en Estados Unidos al activismo contra la violencia de género en Cuba

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Elaín Morales en un concierto ofrecido este mes en el Anfiteatro de La Habana. Foto tomada de su perfil en Instagram (@elainmusic).

Aunque no lo recuerda, Elaín Morales ha contado que la primera vez que su madre supo de su amor por la música fue mientras estaban de vacaciones en Gibara. Él todavía era muy pequeño cuando hizo que un vecino carpintero le fabricara una guitarra de juguete, con la cual recorrió todo el barrio cantándole a la gente. Eventualmente, aquel niño inquieto se convertiría en uno de los músicos cubanos que más veces ha conectado las orillas de Estados Unidos y Cuba en los últimos años.

Este hombre, nacido en La Habana el 22 de enero de 1977, comenzó a tocar la guitarra a los seis años de forma autodidacta. Con el tiempo, fue creciendo como artista de este lado del estrecho, hasta que tuvo la oportunidad de establecerse en el territorio norteño.

Su vida cambió en el 2000, cuando viajó a Estados Unidos como parte de la orquesta Pachito Alonso y sus Kini Kini y poco después decidió echar raíces allá, donde se ha dedicado a su carrera como solista y productor, en la que ha construido un currículo envidiable.

Actualmente, Elaín se halla enfrascado en una gira por toda la Isla, como parte de la cual no solo está ofreciendo su música, sino también conversatorios, conocimientos y otros consejos a la juventud, centrados, sobre todo, en celebrar la vida y promover un mensaje contra la violencia.

El tour, llamado Gira por Cuba, Hilos de Amor, comenzó en 2022 para celebrar sus 22 años de carrera artística y lo ha llevado a provincias como Camagüey y Santiago de Cuba, y planea mantenerse en activo hasta diciembre próximo, cuando debe completar su recorrido por todos los territorios del país.

“Ha sido súper oportuno poder dialogar con la gente, como buscando siempre un punto de encuentro para poder seguir creciendo y evolucionando. Es importantísimo que nuestros niños y jóvenes sientan nuestra presencia, para así poder demostrarles que nos importa lo que está pasando en Cuba y construir un puente de amor a través del lenguaje musical”, declaró recientemente.

En esa ocasión, a pesar de contar ya con más de dos décadas de recorrido sobre los escenarios, comentó: “yo soy un aprendiz de todo, por eso, aun cuando he tenido la oportunidad de grabar varios géneros musicales internacionales, creo que me falta mucho camino por recorrer. Por el momento, mi prioridad es la gira y trabajar en Cuba. Quiero que la gente sepa que estamos aquí”.

Además de la música, desde hace más de una década Elaín es activista en la lucha contra la violencia hacia las mujeres. Su canción Sin pasaje de regreso (2012) fue una declaración de principios en ese sentido y desde entonces ha colaborado con la Red Iberoamericana y Africana de Masculinidades como hombre naranja por la no violencia.

En 2013, su show Elain Volando Alto Mega Especiales, producido por la cadena Mega TV, ganó dos premios Emmy dentro del capítulo Suncoast, perteneciente a la Academia Nacional de Televisión, Artes y Ciencias de los Estados Unidos. Al año siguiente obtuvo otro galardón gracias al programa Sígueme – Celia Cruz Special.

Para la propia cadena Mega TV y la empresa de televisión por cable DirectTV, ha sido la imagen de la campaña DIRECTV Dondequiera, dirigida hacia el público latino. Además, ha fungido como presentador de Sígueme – The Reality, espacio en donde también ha compartido con artistas como su compatriotas Albita Rodríguez, Arturo Sandoval, Jorge Luis Piloto y también el dominicano Johnny Ventura.

Ha compuesto temas como Como tú ninguna para el español David Bustamante; A quién le importa, para la boricua-estadounidense Yolandita Monge; y La mulata abusadora, el cual interpretó junto al DJ francés Gilles Peterson y Telmary para el disco Havana Cultura, de 2010. Igualmente ha producido también para otros como el también ibérico Antonio Carmona, ex vocalista de Ketama.

Su disco debut se tituló Elaín y vio la luz en 2008 con diez temas suyos. Dos años después salió El disfraz de la luz (2010), fonograma compuesto por 14 canciones propias, en donde colaboraron conocidos músicos como Jorge Luis Piloto y Pepe Horta.

El mayor éxito de su carrera lo alcanzó en 2012 con Volando alto – Made on the Road, álbum con el cual obtuvo dos nominaciones para la XIII Gala Anual de los Grammy Latinos, en las categorías de Mejor Artista Nuevo y Mejor Álbum Tropical.

Mi Paraíso (2014) fue una producción que incluyó 19 pistas, con las cuales conmemoró sus 15 años de vida artística. En ella colaboró con Johnny Ventura, Isaac Delgado, Leoni Torres, QVA Libre, Brenda Navarrete y Daniel López. Entre sus producciones discográficas se cuenta, además, Si sonríes otra vez (2021).

Su estreno profesional lo hizo con la agrupación Sello L.A., creada por algunos descendientes de los célebres Papines. Con ellos grabó Tranquilo y sin lío (1999), disco en el cual interpretó el tema que le daba título y también Tasca Tasca.

Más adelante, tras dos años con esa banda, fichó por Pachito Alonso y sus Kini Kini, conocida orquesta que se hallaba entre las más respetadas dentro de la música popular bailable por aquella época.

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