Quizás la reconozcas por Ofelia, la gordita de Una novia para David (Orlando Rojas, 1985) o Beba en Papeles secundarios (del mismo director, 1989), pero la vida de María Isabel se asemeja un poco a la vida de Celeste (llegar a un mundo nuevo, idealizado) y también tiene el ímpetu de Soledad (guía espiritual en medio de la marea amarilla).
La actriz nació en La Habana en 1964. Durante su etapa de estudiante se vinculó a grupos teatrales hasta que en 1982 comenzó a estudiar en el Instituto Superior de Arte. Sin graduarse, se sumó a varios proyectos teatrales y fue en ese período donde apareció en el rol de “esa gorda sin sentimientos” que ya te habíamos mencionado.
Posteriormente participó en otros audiovisuales (interpretó a Osbrújula, protagonista del programa infantil La hora de las brujas, de 1991 a 1994). Algún tiempo después, tal como lo hizo Celeste, emprendió un viaje en búsqueda de lo desconocido. Llegó a España y allí ha continuado con su carrera.
A partir de ese momento -lógicamente ella no lo sabía-, dejaba de ser María Isabel, para convertirse en Celeste. “Cuando empieza la película, Celeste está en un momento en el que está esperando una oportunidad, aunque no sea consciente de ello. Es una mujer que está agotada, que se ha acostumbrado a su monotonía, pero es evidente que cuando tiene una oportunidad acepta montarse en una nave para cambiar de vida”, fueron las declaraciones que dio a la agencia EFE y que varios medios han difundido.
Para esta artista, lo más complejo es llegar a un lugar y empezar de cero. “Fueron años muy difíciles. Muy complicados. Es que cuando te vas del planeta, uno no sabe lo que le espera y uno siempre tiende a idealizar un mundo mejor. Y el mundo está realmente catastrófico en donde quiera que vayas”, manifestó en la entrevista antes mencionada.
En el viejo continente, la actriz cubana posee un importante currículo. Durante 30 años ha participado en episodios de series como Abogados (2001), Hospital Central (2001) y Javier ya no vive solo (2001-2002). El papel fijo que interpretó en esta última, secundario, la hizo sentir muy feliz, pues es de los pocos «serios» que ha hecho: encarnaba a una profesora de primaria.
El año 2006 le sonrió: se convirtió en la primera “chica Almodóvar” cubana. Actuó bajo las órdenes de Pedro en el filme Volver. Regina, prostituta, vecina y cómplice de la protagonista, compartió escena con actores de la talla de Penélope Cruz, Carmen Maura o Lola Dueñas.
Posteriormente tuvo algunas apariciones episódicas en la serie de ficción española más vista en su momento y líder de audiencia desde su estreno, Aída.
Si hablamos de ruptura y cambio en la vida de María Isabel en 2006, el año 2015 llegó con otro gran logro en su carrera. Ser «La Sole» de Vis a vis, una de las protagonistas de la famosa serie española sobre la vida en una cárcel de mujeres, no fue nada fácil. En la versión hispana de Orange is the New Black, ella era una víctima de la sociedad y el sistema. Esa maternal reclusa fue condenada a 22 años de cárcel por matar a su marido después de años de violencia doméstica.
Ese mismo año recibió el Premio Ondas Nacional de Televisión al Mejor Intérprete Femenino en Ficción. Para ella, el éxito radica en que “mantener tanto tiempo un personaje en tu carrera da la oportunidad de ir caminando a su lado y crecer los dos juntos”.
Al año 2018 le entró renovada de alma y cuerpo. Perdió 92 libras de peso y, aunque este cambio físico se ha incorporado a la trama de Vis a Vis, no fue una exigencia de ningún guion.
En 2019 pudo vérsele en El extraordinario viaje de Celeste García, del director Arturo Infante, donde su personaje, el protagónico, es una maestra retirada que sirve de guía en un planetario y se presenta como voluntaria para viajar a otro planeta.
Ha participado en otros proyectos como las series El continental y Secretos de Estado; también fue Janice en La llamada, ópera prima de Javier Ambrossi y Javier Calvo.
En cierto momento se ha quejado de los estereotipos en los que la han encasillado como latina (personajes de prostituta o empleada doméstica).
Recientemente, tuvo otro cambio de imagen que generó un gran revuelo en las redes sociales, ante lo cual explicó: «he bajado muchísimo de peso y he ganado en peso emocional y en arrugas. Tengo el cuerpo mucho más curtido y más envejecido, algo que le presto a mi personaje».
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