De cara a la edición 53 de la Serie Nacional de béisbol cubana, la Comisión Técnica de Las Tunas, inmersa en un proceso de renovación de peloteros para la temporada que se avecinaba, descartó a tres jugadores por su veteranía: Yordanis Scull Zayas, Joan Carlos Pedroso Brooks y Michael Brito Espinosa.
A ellos se les informó que, al no estar en los planes del equipo tunero, si deseaban competir por otra provincia podían hacerlo y así evitaban retirarse. Ninguno decidió representar a otro conjunto. En ese entonces, Brito tenía 30 años.
Luego de ser rechazado, jugó su campaña final en la Serie 54, bajo las órdenes de Ermidelio Urrutia, y después se vinculó como entrenador al béisbol de su provincia. Su última función fue la de preparador físico del elenco de su territorio que participó en el Campeonato Nacional juvenil de 2018.
Desde hace alrededor de cinco años trasladó sus conocimientos a la pelota de Italia, donde se unió desde el primer momento al cuerpo técnico del club Padule Baseball Sesto Fiorentino, integrante de la Italian Baseball League, como se nombraba la principal categoría de ese país europeo. En funciones de coach coincidió con tres peloteros de su época en la Serie Nacional: los tuneros Yordanis Alarcón y Yordanis Scull y el lanzador derecho pinareño Vladimir Baños.
El 4 de febrero de 2021 su entidad publicó en Facebook la confirmación de que él sería el manager ese año en la temporada de la Serie B (segunda división), programada para comenzar a finales de abril. Según el comunicado, el propósito de Brito era continuar mejorando el nivel de sus atletas. En las dos campañas siguientes se ha mantenido como timonel, pero en la Serie A, división élite.
Nacido el 12 de enero de 1983, en las categorías menores participó en certámenes en Colombia, Japón y Curazao. Su estreno en el torneo élite de la pelota en la Isla ocurrió en la contienda 2003-2004 y repitió en las dos ediciones siguientes. Reapareció en la Serie 48 y se mantuvo hasta la 52, y como mencionamos, su campaña conclusiva fue la 54. Se desempeñó casi siempre en el infield.
En nueve temporadas con los Leñadores realmente no consiguió buenos números. Su average quedó en .228, con 135 anotadas, 192 imparables, 29 dobles, cuatro triples, cinco jonrones, 71 impulsadas, 148 boletos y 134 ponches. Salvable su promedio de embasado: .362.
Su mejor contienda, por mucho, fue la 49, en la cual bateó .305 y produjo su mayor cantidad de tubeyes (ocho), cuadrangulares (dos), remolcadas (16) y anotadas (28). El OBP fue .408.
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