Hace unas horas terminó el Mundial de Balonmano para hombres, celebrado entre el 11 y el 29 de enero en Polonia y Suecia, con el tercer título consecutivo para Dinamarca, quien derrotó en la final a Francia 34-29. Pese a que Cuba no participa en estas lides desde 2009, cuando ancló en el vigésimo escaño, en las últimas ediciones sí ha habido presencia de atletas oriundos de la mayor de las Antillas, sobre todo en Portugal y Catar.
En el recién concluido torneo, en defensa de la causa lusitana estuvieron los pívots Alexis Borges y Víctor Iturriza, mientras que el veterano lateral izquierdo, Rafael Capote, representó al equipo del oeste asiático por quinta justa del orbe seguida (había estado antes en las versiones de 2015, 2017, 2019 y 2021). Hoy nos referiremos a este último, quien, antes del Mundial había disputado 88 partidos internacionales para su país de acogida y anotado 336 dianas, según números de la página oficial de la Federación Internacional de Balonmano (IHF, por sus siglas en inglés).
En el último concurso universal, el nacido el 5 de octubre de 1987 no tuvo su mejor campeonato y tampoco gozó de toda la confianza del español Valero Rivera, quien solo lo colocó sobre la cancha en tres de los seis choques. De 27 remates a portería pudo convertir 12 goles (44% de efectividad), números bastante alejados de la calidad que ha mostrado generalmente el cubano en sus apariciones en otras competencias con la camiseta catarí. No obstante, fue elegido como el MVP del partido donde se produjo la única victoria de los suyos (29-24 ante Argelia).
Finalmente, su equipo acabó en el puesto 22, tras caer ante Alemania (27-31), Serbia (24-34), Países Bajos (30-32), Noruega (17-30) y Argentina (22-26).
A los 35 años, la exitosa carrera del jugador del Al-Duhail de la liga de su país, al menos a nivel de selecciones pudiera estar llegando a su final, y parece bastante alejado aquel 11 de julio de 2007, cuando decidió escapar de la concentración del conjunto cubano que disputaría el torneo de los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro. Luego de aquel suceso, su nombre resonó en varios medios de prensa del mundo.
Días más tarde, contó a AFP que en la noche que decidió escapar llovía mucho y aprovechó para huir por debajo de una cerca. Después tomó un taxi hasta Sao Bernardo do Campo, en Sao Paulo, para encontrarse con el guardameta Michel Bravet, excompañero suyo que jugaba de forma profesional en Brasil desde hacía dos años.
Tras un tiempo en esa nación sudamericana se fue a Italia, donde firmó por el Pallamano Conversano, club en el cual permaneció entre 2007 y 2009, pero su gran salto llegaría al arribar a la Liga ASOBAL española, una de las más fuertes del planeta, cuando fichó por el BM Ciudad Encantada (actualmente Rebi Balonmano Cuenca), donde estuvo dos temporadas antes de marcharse al CB Naturhouse La Rioja (ahora BM Logroño La Rioja), escuadra con la que jugó en la primera incursión del equipo en la Champions League y en poco tiempo se convirtió en una de las grandes estrellas del club y del certamen ibérico.
Tras triunfar allí, en 2013 se marchó a Catar, país en donde se desempeña hasta la actualidad. Después de que él recibió la nacionalidad catarí, ese territorio organizó el Mundial de 2015, donde Capote debutó como internacional con la franela de dicho representativo.
Su escuadra, contra el pronóstico de todos los especialistas, se coló en la final y perdió ante Francia con cerrado marcador de 25-22. Rafael integró el Todos Estrellas del torneo como mejor lateral izquierdo y se reafirmó entre la élite del balonmano a nivel global. Además de ello, fue el quinto entre los goleadores de toda la justa, con 48 dianas en 78 intentos.
Un año más tarde se reencontró con Río de Janeiro, pero en esa ocasión para disputar los Juegos Olímpicos, donde su combinado cayó en cuartos de final ante Alemania y quedó fuera del acceso a las medallas.
Durante su participación en la cita del orbe de 2023, el también multicampeón de certámenes asiáticos confesó que está trabajando para obtener su título de entrenador.
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Solo precisar que si Rafael Capote no jugó más no fue por el entrenador Ilustrísimo Sr. D. Valero Rivera, fue porque Capote se lesiono primero el isquiotibial y luego el pectoral.
Gracias