A Danilo Paris lo conoció Cuba entera a mediados de los 2000, cuando la televisión nacional estrenó Alánimo, espacio musical mediante el cual se promovía temas del cancionero infantil. Allí, el entonces jovencísimo muchacho, nacido el 2 de julio de 1994 en Colombia, provincia de Las Tunas, estuvo durante varios años como presentador y también demostró sus dotes para el canto.
La predisposición artística de Paris venía desde mucho antes y había sido cultivada en casa. Sus padres, oriundos del Balcón del Oriente, se mudaron hacia La Habana a los meses de traerlo al mundo y desde muy temprana edad incentivaron en él la pasión por la música.
Su papá, de quién heredó, entre otras cosas, el nombre, fue factor fundamental en su pronto despunte como futuro talento, aunque el propio Danilo ha dicho que su crecimiento no estuvo marcado por las prisas a las que se ven sometidos los pequeños con una capacidad extra para el arte.
“De niño fui tranquilo y extrovertido. Cumplía con todo, nunca fui de romper reglas y fui bastante aplicado en la escuela. En esa etapa de la primaria estudié música con clases particulares. De ese tiempo me quedó eso de preocuparme por prepararme y superarme”, contó en 2023 en el espacio La casa de Maka.
Ya cerca de los 30, hoy Danilo toca el piano, la guitarra y la quena, y sigue recordando con muchísimo cariño cuando, con solo cinco años, participó junto a su papá en un concurso de aficionados tocando la flauta. Más adelante llegaría su primer momento grandioso en el concurso Cantándole al Sol 2007 con el tema Amanecer, compuesto por su padre, y con el cual ganó el primer lugar en esa edición.
En paralelo a su naciente carrera como vocalista, el chico debutó como presentador televisivo a los 9 años en el espacio infantil Para ser mejores y luego apareció también en Quiero saber. Más adelante ganaría bastante notoriedad gracias a su presencia en Alánimo, sin dudas el programa que marcó su vida por entonces.
Durante el preunivesitario, que cursó en el IPVCE Vladimir Ilich Lenin, Danilo creó su primera banda, Slogan.
Pasados algunos años, en 2012 fue elegido para compartir con Rubén Araújo (Albertico, el de La Sombrilla Amarilla) como anfitrión de Conexión, show juvenil en donde se debatían temas de interés para los adolescentes cubanos e igualmente había lugar para la música.
Después de una larga etapa delante de las cámaras, el joven decidió cambiar de rol y se graduó en la especialidad de Dirección en la Facultad de las Artes de los Medios de Comunicación Audiovisual (FAMCA), perteneciente al Instituto Superior de Arte.
Como realizador, obtuvo junto a Gabriel Alemán el premio de Mejor cortometraje de ficción y Mejor dirección en la Muestra de Cine Joven (MCJ) del Icaic de 2016, en donde presentaron los cortos Autómatas y El Cóndor.
Otras de sus obras como director son La sed humana, también en colaboración con Alemán y que fue mención en la categoría de Ficción durante la 17ma. MCJ (2018); y La noche de los asesinos (2019), el cual filmó junto a Laura Batista.
También ha participado como sonidista y diseñador de banda sonora en el corto La sal del caramelo (2017) y creó la música para Karla (Gisselle Vartas; 2021).
“Si bien me gusta la realización audiovisual y también escribir, lo que realmente me quita el sueño es la música. Yo no puedo vivir sin hacer música porque es lo que realmente me hace sentir realizado. Por eso en un momento decidí no hacer más televisión ni cine, para centrarme verdaderamente en esa arista, y por ahí fue que mi carrera como cantante empezó a crecer”. En su perfil de Facebook se describe como “cantante y director de cine”, en ese orden.
Con el objetivo de seguir su gran meta, en 2018 lanzó su primer disco, titulado Collage —mismo nombre de la segunda agrupación que integró—, y desde entonces hasta el presente, ya en solitario, ha publicado sencillos como Playlist, Mejor sin ti, Cefeidas, Nostalgia, Serenata de balcón y Bóveda celeste, tema al cual le hizo un remix junto a Jotabarrioz.
En 2022 ganó el premio en la categoría Mejor Artista Pop del Festival Cuerda Viva, reconocimiento que significó un notable espaldarazo a su dedicación y talento.
Sin embargo, sus éxitos como cantante se le quedaban pequeños por varias razones, incluido el hecho de que vivía separado de su familia desde que en 2016 sus padres y su hermana mayor se fueron a vivir a Estados Unidos.
Danilo decidió emigrar a la Florida, territorio al que llegó por la vía del Programa de Parole a inicios de febrero pasado. De esta forma no solo consiguió reencontrarse con sus seres queridos, sino también comenzar una nueva etapa de su vida artística.
Desde su llegada al país de las barras y las estrellas, él ha realizado varios conciertos, el primero de los cuales tuvo lugar en octubre de 2023 en el Westchester Cultural Arts Center. Desde entonces ha podido compartir escenario con algunos colegas, e incluso con un compatriota suyo de grandísima trayectoria como es el cantautor Amaury Gutiérrez.
“Creo que cuando la música es sincera logra conectar siempre con las personas. Y pasa algo curioso con temas como Nostalgia, originalmente concebida por mí como una canción de amor, pero que ha sido reinterpretada por mucha gente que me ha escrito diciéndome que les permite recordar a otros seres queridos”, dijo en MegaTV.
“Trato todo el tiempo de aprender, de perfeccionarme, de nutrirme no solamente de música, sino también de tener referentes cinematográficos, históricos, o sea, tratar de tener un conocimiento más global del arte a la hora de crear”, confesó durante su visita al programa La casa de Maka.
Para conocer más de sus creaciones musicales, pueden seguir su canal de YouTube y su perfil de Instagram, dos plataformas en donde es bastante activo.
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