Una vez más y nuevamente sin recibir explicación alguna, este pelotero cubano no fue tenido en cuenta para conformar un equipo nacional. No se trata de un jugador que aspira a integrar la selección antillana, sino del guantanamero-habanero Yoel Caballero Mendoza, quien pretende vestir el uniforme del conjunto nacional de España.
Ahora mismo y desde hace algún tiempo, no tiene otra meta que esa, ni siquiera trasladar sus condiciones a una liga de mayor calidad que la División de Honor ibérica, donde se desempeña.
Es ciudadano español y talento y rendimientos de nivel tiene por arrobas, pero sucede que la Real Federación de Béisbol y Softbol (RFEBS) de ese país parece tenerle manía. El joven jardinero, por un lado, brilla a su antojo, y el organismo o alguien en particular, por el otro, lo apaga deliberadamente.
Ejemplos de injusticias hacia él tengo varios, abordados en un material anterior, pero hoy vengo con el más reciente y, quizás, más intolerable.
La pasada semana, Juan Carlos Cerdá Aragonés, Director Técnico de la RFEBS, le notificó a la directiva del club San Inazio Bilbao que ocho de sus jugadores estaban convocados para intervenir en la Prague Baseball Week, que se efectuará en la República Checa, del 20 al 26 de junio. Allí, además del elenco español, competirán dos novenas locales, una de Francia, Estados Unidos, Canadá, Grecia y Europa.
Entre los llamados a filas aparecen los cubanos Eduardo Blanco, Anibal Medina, Armando Dueñas y Royd Hernández, de Matanzas, y el receptor santiaguero José Abilio Ferrer, pero a Caballero la mano negra lo volvió a abrazar, por lo tanto no estará en la justa checa.
Lo más indignante de esta ocasión es que el patrullero de 26 años sostiene el mejor average de su elenco y es el cuarto de la liga, con .449. Para quienes no crean solamente en ese indicador, que ya dice mucho, les añado que en todo el circuito él es tercero en anotadas (17) y dobles (seis), segundo en imparables (22) y cuarto en OBP (.547).
Además, siempre como right field, aunque defiende los tres jardines, presenta un triple, un jonrón, 14 remolcadas, 12 boletos e igual cantidad de ponches y tres bases robadas en cuatro salidas.
Con esos números, cabía sobrado en el conjunto español que estará el mes próximo en Praga y eso lo sabe cada uno de los miembros de la directiva de la RFEBS, empezando por su presidente Jesús Lisarri, quien debe tener algún poder de decisión en casos como estos, de tamaña injusticia, y para colmo recurrente en un mismo jugador.
Si Caballero cae mal de gratis a los decisores, opción que no descarto, la Prague Baseball Week es la lid ideal para darle una chance y que él mismo, con su rendimiento, sea quien se elimine de una vez y por todas o demuestre que sus convincentes desempeños trascienden la División de Honor.
Al ser un torneo de nivel medio, incluirlo era una manera elegante de lavarse las manos como Poncio Pilatos, pero la gente de la RFEBS no quiso arriesgar parece, consciente de las implicaciones.
El cubano, All-Star en 2020 y con cuatro campañas sucesivas bateando por encima de .340 -sin contar la actual- en territorio ibérico, ha mostrado una paciencia de acero ante estos atropellos, pero ¿seguirá resistiendo el juego sucio que hoy lo abruma? Temo porque la desesperanza termine malogrando la carrera de un joven lleno de talento y deseos.
Bueno no solo es la CNB de Cuba!
Todo esta muy bien , gracias