Hace poco más de una semana, la cubana Déborah García Morales ganó el Premio Alegría que entrega el Ayuntamiento de Santander, en España. Su texto, Te doy el mar, se llevó los aplausos de un jurado en el que, según Rafael Fombellida, resaltaron «tres pilares esenciales: memoria, mar y ritmo».
Por su parte, Carmelo Guillén, otro de los encargados de valorar el texto, indicó que este posee un «gran lirismo, es un libro de la memoria y al mismo tiempo de una inteligencia emocional muy viva». Fue seleccionado como el mejor de 768 trabajos enviados.
Luego de ello, la poetisa recibirá un monto de 4 mil euros. Su libro será editado en los primeros días de octubre y la entrega del galardón ocurrirá al cierre de este 2019.
Esta es la segunda ocasión en la que un escritor nacido en la mayor de las Antillas obtiene este lauro, luego de que lo ganase Daer Pozo en 2012.
El Premio de Poesía «Alegría» tiene carácter internacional y el nombre viene de un poemario de José Hierro publicado en 1947.
Déborah nació en 1971, en Cuba y actualmente reside en el país. Es licenciada en Ciencias Farmacéuticas y ya tiene un pasado en la literatura.
Hace pocas horas, la antillana ha ofrecido una entrevista a El diario montañés en la que ha conversado sobre su obra y su vida personal. Acá queremos dejarte un resumen:
Inspiración: «Vivo en una ciudad sin costas, pero tengo una conexión sustancial con el mar (…) En mi poesía siempre hubo esas marcas, esa nostalgia, ese deseo perenne del mar.
Inicios en la literatura: «mis primeros intentos aparecieron en las últimas hojas de mis libretas escolares en la adolescencia».
De nuevo, la inspiración: «una vez fueron un muelle y una casa de tablas sobre el agua donde yo solía quedarme quieta, contemplando el movimiento de los botes, de la gente, y eso me daba paz, me conectaba con mis esencias».
Concepto sobre la poesía: «una especie de instrumento óptico; como el telescopio, que permite divisar la infinitud exterior, o el microscopio, que hace lo mismo pero en sentido inverso».
Importancia de este premio para su obra: «aunque no creo que un premio sea la última palabra en cuanto a calidad literaria, sería ingenuo ignorar los efectos prácticos que ejercen sobre la obra de un autor».
Cuba y la poesía: «En Cuba se publica poesía, se lee y se premia, nuestros trovadores cantan mucha poesía. Gracias a la poesía muchos cubanos hemos conservado cosas que sin ella habríamos perdido».
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