No me gusta la sangría, señor Noé
Lo que no entiende el señor Gaspar Noé: en una película, el sexo como performance no es utilitario al arte.2 min
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Debemos aceptar que Alan Moore no es de estos tiempos.2 min
Al final de sus 27 años se creyó un mesías, y quiso regalarle a Gianni Versace un privilegio mayor que la fama: la posteridad.3 min
La calle G fue lo más cercano a una utopía social. En las noches se volvía una república.3 min
Witold durante toda la película se expresa en tics explosivos de lenguaje como cápsulas líquidas del mal de Tourette.2 min
Pintaba durante el día en cualquier rincón escupido por los vagabundos.3 min
¿Cómo es posible que renazcan los "tierraplanistas"?4 min
Podemos decir que esta vez la Academia pisó la raya, pero no entró.5 min
Antes de este film ya nadie pensaba en los trolls más allá de la práctica nerd del “trolleo” en Internet.2 min
Quiero dejar claro que me gusta el cine asiático, pero no los idiomas asiáticos.3 min
En el piso, los cuerpos ociosos de dos botellas de vodka, litro y medio cada una.2 min
Los maderos de los cubanos, salvo contadas excepciones, simulaban fusiles con pólvora mojada.5 min