Desde hace semanas, la telenovela Renacer acapara la atención de muchos espectadores cubanos y genera varios temas de conversación en páginas y grupos en redes sociales, a partir de las diferentes tramas que se van desencadenando con el paso de los episodios.
Una de las historias que se ha robado el interés ha sido la concerniente a Liliana, interpretada por la actriz Gisselle Fajardo, y Héctor (Jorge Molina), quien violó a la joven y provocó uno de los momentos que más han sido comentados hasta ahora en línea.
Sobre ese tema habló recientemente en el canal de YouTube Cuba Today + la propia protagonista de esa terrible historia y reveló que atravesó por una situación similar.
Contó que mientras estaba en séptimo grado, ella y dos compañeras de aula fueron un sábado a la secundaria porque habían sido citadas allí por el profesor de educación física, supuestamente para ensayar «una tabla gimnástica».
«De repente nos manda a sacudir el borrador y, muy ingenuas al fin, vamos lejos a sacudir el borrador. Cuando viramos, veíamos que él tenía el short por debajo de las rodillas y estaba mast…dose. Yo no le dije nada a nadie por miedo. Tenía miedo contarle eso a mis padres, y que incluso pensaran que había sido culpa mía, por llevar una saya corta, por algo que había provocado yo misma», agregó.
Según Fajardo, luego una de las estudiantes se lo comentó a la directora de la escuela y el hombre fue enjuiciado, estuvo en prisión e igualmente se le impuso una orden de alejamiento.
Por si lo anterior pareciese poco, Fajardo añadió que tuvo una segunda experiencia, que fue mucho más allá, mientras se encontraba en el centro de aislamiento ubicado en el Instituto Superior de Arte (ISA), durante la etapa de la pandemia.
Allí se mantuvo trabajando durante quince días y en la última jornada, cuando se dispuso a dormir, olvidó apagar la luz de su habitación y cerrar la puerta con llave. La persona que se encargaba de fumigar los cuartos entró a la habitación y ella entonces sintió que la estaban tocando en sus partes íntimas por encima de la ropa.
Al despertarse, narró que se quedó mirando al hombre de frente durante unos segundos, y luego empezó a correr y a tocar las puertas de los locales donde descansaban las enfermeras y las doctoras. El señor se desapareció. En las primeras horas de la mañana llegó la policía y ella hizo la denuncia. A los meses la contactaron las autoridades para comunicarle que al acusado le había sido notificada una orden de alejamiento.
La actriz y cantante de 27 años, oriunda de Playa Baracoa, también forma parte de la compañía teatral El Público, bajo la dirección de Carlos Díaz, y hace unas semanas participó en la temporada veraniega de la obra Réquiem por Yarini, cuyas puestas en escena se reanudan este propio mes de septiembre.
👉Si quieres recibir en tu WhatsApp los artículos que publicamos habitualmente sobre temas cubanos o la actualidad de personalidades dentro y fuera del país, únete a nuestro grupo:
0 Comentarios