La vida de Joel Angelino es una de esas historias que parecen escritas para el cine: hay éxito, oscuridad, reinvención y, sobre todo, muchas ganas de transformar el dolor en arte. Radicado desde hace años en España, este actor cubano vuelve con un nuevo proyecto cinematográfico tras el reciente estreno de Neurótica anónima. Se trata de Acoso, que rodará en 2026 en Canarias y que parte de una vivencia personal tan dura como universal. Así lo contó recientemente al Diario de Avisos, donde confesó que el germen de la película fue un reencuentro inesperado con quien lo acosó en su infancia. “Al encontrármelo, sentí rabia y ganas de tomarme la justicia por mi cuenta. Pero enseguida me di cuenta de que la mejor manera de sacar toda esa ira que aún sentía era transformarla en experiencia artística”, relató.
Acoso no es un ajuste de cuentas personal. El guion, escrito por el propio Angelino junto a Amílcar Salatti y con argumento compartido con el cineasta canario Santiago Ríos y la actriz cubana Gretel Cazón, aborda distintas formas de acoso, denigración y discriminación, pero sobre todo se detiene en quienes las sufren. “Santiago abrió la historia a los diferentes tipos de acoso y, además, me acompaña como director. Tengo experiencia en la dirección de actores, pero no en la técnica cinematográfica, y en esa parte él es esencial”, explicó el intérprete al citado medio, dejando claro que, aunque debuta como director, no lo hace solo.
El proyecto, aún envuelto en la reserva propia de los comienzos, ya tiene nombres confirmados: Carlos Sáenz en la dirección de arte, Roberto Ríos en la fotografía, y un reparto donde figuran Adrià Collado, Águeda Lima, Gretel Cazón, Marcela Kauffman y el propio Angelino. La música, además, contará con la voz de Chago Melián interpretando la canción principal del film, Quiero escapar de ti.
Acoso llega en un momento de madurez para Angelino, quien acaba de estrenar en Cuba el filme Neurótica anónima, dirigido por Jorge Perugorría y protagonizado por Mirtha Ibarra. Pero su carrera se ha forjado a base de retos, saltos al vacío y mucha resiliencia. Nacido en la década del 70 en Sagua La Grande, se dio a conocer en Cuba a los 19 años con su participación en la icónica Fresa y chocolate, y poco después decidió buscar nuevos horizontes en España.
Su camino no ha sido sencillo. Tras graduarse en la Escuela Nacional de Arte de La Habana, Angelino se mantuvo siempre cerca del teatro, medio que nunca abandonó y en el que ha cosechado premios como el Grand Prix del Festival de Teatro de Lugano, además de girar internacionalmente con varias compañías. Antes del rodaje de Fresa y chocolate, ya había hecho suyo en monólogo El lobo, el bosque y el hombre nuevo, texto en el que se basa el filme, y que según declara, Senel Paz escribió expresamente para él. En la película interpretó a Germán, el escultor.
Ya en Madrid, su formación le permitió trabajar como docente en la Escuela de Interpretación Cristina Rota y, a inicios de los 2000, aparecer en películas como Buñuel y la mesa del rey Salomón (Carlos Saura) y El oro de Moscú (Jesús Bonilla). También formó parte de series tan populares como Un paso adelante y Aída, donde los espectadores españoles pudieron apreciar su versatilidad y carisma.
Sin embargo, no todo fue éxito. Como publicamos previamente en Cubalite, en 2008 vivió una experiencia traumática con el poderoso productor José Luis Moreno, quien lo acosó y despidió tras negarse a sus insinuaciones. Joel lo denunció, pero pocos le creyeron en ese momento. “O follas o te vas”, le exigió el ibérico. El cubano, que llegó a intentar quitarse la vida, solo recibió una compensación económica y el silencio como respuesta. Años después, cuando Moreno fue detenido y salieron a la luz otros casos, Angelino pudo contar su historia en el programa Todo es verdad, dejando claro que lo que le sucedió debía servir de escarmiento.
Afortunadamente, el arte fue su refugio y su motor para seguir adelante. Después de aquel episodio, estrenó sobre las tablas obras como Sexto sentido, Neurótica anónima y Obsesión habanera. En 2021 presentó La historia de mi vida. ¡Toma Moreno!, un musical autobiográfico y humorístico donde se reía de sí mismo y de todo lo vivido, y que optó por que no girase en torno a la figura del famoso español.
Hoy, desde la serenidad que da el tiempo y la experiencia, Joel Angelino se embarca en una película que busca remover conciencias y abrir debates necesarios sobre el dolor, la memoria y la capacidad de transformar las heridas en arte. Porque, como él mismo ha demostrado, a veces la mejor justicia es la que se escribe con luz, cámara y verdad.
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