El actor Reinaldo Cruz, más conocido como Rini, no necesita mucha presentación. Desde que cautivó al público con su personaje de Lorencito en la gustada aventura Hermanos, y luego con el Marcos Urquiza de la telenovela Pasión y prejuicio, se ganó un puesto de avanzada entre los más talentosos de una generación dorada que incluye nombres como los de Alberto Pujol, Néstor y Luisa María Jiménez, Amarilys Pumeda, entre otros.
Durante su etapa en Cuba, al nacido en 1957 en Santa Isabel de las Lajas (Cienfuegos) se le recuerda igualmente por sus roles en las teleseries Hoy es siempre todavía, Una muchacha, Antonia, Los bucaneros, Magdalena, El eco de las piedras y La leyenda del rayo. De forma paralela se mantuvo con diferentes obras sobre las tablas y también detrás de las cámaras como parte de equipos técnicos.
Es imposible hablar de Cruz sin mencionar a su esposa Anabel Leal, actriz con la que compartió en varios proyectos en su tierra natal y con quien se casó durante la década de los ochenta. Ambos se marcharon juntos en 1998 hacia Angola y, durante su estancia en ese país, según un trabajo publicado por el periódico 5 de Septiembre, ofrecieron asesoría en la recién fundada televisión pública de aquella nación. Allí incluso nació el segundo hijo de ambos, Juan Ariel (el primero, Abel, vio la luz en 1990).
Refiere el propio medio cienfueguero que tras su trabajo en la nación africana, a la pareja le brindaron la oportunidad de seleccionar el sitio que quisieran para irse de vacaciones con todos los gastos cubiertos. Escogieron ir hacia Estados Unidos, territorio al que arribaron en el año 2000 y donde decidieron establecerse.
Al inicio no fue nada fácil para los dos: Rini debió trabajar como empleado en la construcción y Anabel limpió casas. Por las tardes estudiaban inglés. En la escuela de idioma, los integrantes del dúo Rosell y Cary, que alcanzaron cierta notoriedad en Cuba años atrás, les dieron la idea de crear una compañía de producción audiovisual.
Fruto de aquella conversación surgió Imago Studio, hace alrededor de 20 años, cuyos primeros trabajos tuvieron lugar en fiestas de bodas, quinces, cumpleaños, entre otros eventos. Luego incursionaron en la publicidad y esa decisión marcó el despegue de la empresa. «Hicimos varios comerciales que todavía se ponen en la televisión», comentó Cruz a Carlos Otero en La hora de Carlos Live.
En la pasada década les llegó la invitación para involucrarse en el apartado técnico del programa Clave Guajira, del cual han fungido como escritores y productores. El show ha sido transmitido por AméricaTeVé y luego pasó a la señal de Univista TV.
Antes de enfocar casi exclusivamente su trabajo en Imago, Reinaldo actuó en producciones de Fonovideo, Telemundo y Venevisión Internacional (Secreto de amor, Tierra de pasiones, Decisiones, El fantasma de Elena, Santa Diabla, entre otras) en la mayoría de ellas con pequeños personajes. Igualmente se desempeñó como coach, creador de contenido y productor del famoso espacio Caso Cerrado.
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