Hasta la jornada de hoy, el equipo Cuba de béisbol es uno de los dos conjuntos con tres victorias e invicto en el Campeonato Panamericano (Premundial) Sub-23, con sede en la ciudad mexicana de Aguascalientes. Los dirigidos por el pinero Armando Johnson vencieron a Argentina, Venezuela y Puerto Rico y tienen casi garantizado su boleto para el Mundial de la categoría, a efectuarse en octubre de este año en Taipéi de China.
Uno de los integrantes del plantel argentino que enfrentó en el debut a los cubanos y ha participado en los tres compromisos de su novena es Noe Pedro Tortoló Santa María, un jugador nacido en Buenos Aires el 24 de enero de 2003, pero con un vínculo familiar y muy estrecho con Cuba, donde vivió durante varios años.
Antes de comentar sobre su relación con nuestro país, les ofreceré sus estadísticas en el torneo mexicano, que le permitió debutar con un equipo nacional de su país natal. En tres juegos (dos como bateador designado y uno en funciones de jardinero izquierdo) acumula seis veces al bate, con un imparable, una anotada, una impulsada, dos boletos, tres ponches y lo cogieron robando en una ocasión. Frente al pitcheo antillano negoció una transferencia y se ponchó una vez.
De acuerdo con un artículo publicado la semana pasada por el colega argentino Diego Beccacece, Noe Pedro se unió al elenco sudamericano para intervenir en esta justa en Houston, Estados Unidos, pues allí reside desde hace pocos años y es matrícula de IMG Academy, en Bradenton, Florida.
El pelotero de 19 años, cuya madre es argentina, es hijo del entrenador cubano de béisbol Noel Tortoló, descendiente de Pedro Tortoló, quien fuera coronel de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y principal jefe militar cubano en Granada, cuando ocurrió la invasión estadounidense y de otras naciones caribeñas a ese país, en octubre de 1983.
Según el medio Béisbol Argentino, el más pequeño nació en la barriada de Palermo y al decir de sus propias palabras, permaneció en ese país hasta los cinco años. Tiempo después su papá lo trajo para La Habana.
“Ahí jugué -en Cuba- con la preselección nacional U15, pero no llegué al equipo nacional porque no soy 100% cubano. En Buenos Aires me quedaron familiares por parte de mi mamá, como mi tío y mi abuela.
“De los jardines me gustan Mike Trout, obviamente, y la garra con la que juega Yasiel Puig. También miro mucho los movimientos de Fernando Tatis en el shortstop, su flow es para admirar, y a Javy Báez. De él me quedo con la pasión que le pone al deporte”, dijo a esa publicación a finales de 2019.
En julio de 2016 participó en la sexta edición del Torneo Internacional Punta Cana, en República Dominicana, como parte de un conjunto compuesto por niños de La Habana y sin vínculo con la Federación Cubana de Béisbol. El manager del plantel fue su padre y allí abandonaron la pequeña delegación los hermanos Roberto y Raúl Campos.
Un año antes, Noe Pedro, también dirigido por su progenitor, acudió al torneo Disney International Salute to Baseball, en Orlando, Florida, donde el equipo Habaneros U12 se quedó con la medalla de bronce.
excelente entrega esta….realmente DLR es el mejor rastrando donde haya un cubano o con raíces…..abrazos desde África.