En la penúltima posición de la Zona Sur terminó el club Olmecas de Tabasco en la primera mitad de la Liga Mexicana de verano de béisbol, tras 21 victorias y 39 reveses. Después de algunos ajustes en el equipo y la llegada de caras nuevas, los Olmecas, tras diez partidos celebrados en la segunda mitad, están ubicados en la cuarta posición de su apartado, con cinco triunfos e igual cantidad de fracasos, a un solo juego de diferencia de los líderes Diablos Rojos del México, Leones de Yucatán y Tigres de Quintana Roo.
Buenas vibras ha ofrecido para el plantel verde en los primeros choques de la segunda parte del campeonato la presencia del pelotero granmense Roel Santos, quien debió estar desde el inicio del circuito, el 4 de abril, pero por cuestiones burocráticas y cierta dejadez de las autoridades deportivas cubanas pertinentes, se perdió la pretemporada y los 60 partidos del primer segmento. No pocos daban por seguro que él ya no estaba en los planes del conjunto.
Algo, hasta ahora, le ha quedado bien claro -tanto a Roel como a su club-, y es esa vieja frase que reza que nunca es tarde si la dicha es buena. No cancelarle el acuerdo al jardinero granmense le ha reportado al equipo de Tabasco tener un patrullero central y primer bate con las condiciones para rendir a ese nivel, algo que está demostrando perfectamente, como hizo en Colombia y Canadá.
El jugador nacido en Niquero hace 31 años es líder en indiscutibles y segundo en average de su equipo durante la actual etapa. En diez choques promedia para .409, con 18 imparables, once anotadas, seis tubeyes, un triple, dos jonrones, ocho impulsadas y OBP de .447.
Santos, como dato curioso, ha conectado al menos un imparable en todos los encuentros y en tres juegos ha producido igual número de hits. Su estreno influyó en la victoria de su escuadra, con un triple en el primer turno al bate ante los envíos del derecho matancero Jorge Martínez. Su mejor jornada fue la del 30 de junio, en la que bateó de 5-3, además de un tubey, un bambinazo, cuatro remolcadas y un total de siete bases.
El cubano ha aceptado muy bien las instrucciones de su entrenador de bateo, el ex industrialista Bárbaro Cañizares, quien también tiene entre sus discípulos al santiaguero Ronnier Mustelier —entre los cinco primeros bateadores del circuito— y al agramontino Daniel Carbonell.
La escasa pero productiva actuación de Roel ha convencido a varios conjuntos mexicanos y ayer durante el draft de la Liga Mexicana del Pacífico para esta temporada, resultó el primer extranjero elegido en la ronda de los jugadores foráneos, cuando Naranjeros de Hermosillo, uno de los conjuntos más exitosos, apostó por sus prestaciones. De esa manera tiene asegurado trabajo en la pelota invernal azteca.
De cara a los Juegos Panamericanos de Lima si un atleta será clave en la elaboración de jugadas que requieran velocidad sobre las bases o efectivos toques de bola, por poner apenas dos posibilidades, ese es el jardinero granmense. Habría que ver si Rey Vicente Anglada lo incluye en su equipo definitivo. Dada su maestría y excelente forma deportiva actual tiene todas las papeletas para ser el center field regular de ese equipo en Perú.
*Este material fue escrito antes de la jornada de ayer
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