Uno de los shows de talentos más populares del país en el pasado reciente fue Sonando en Cuba. Con un jurado que inicialmente formaron Laritza Bacallao, Moisés “Yumurí” Valle y Emilio “El niño” Frías, y luego fue integrado por los también estelares Paulo FG, Mayito Rivera y Haila María Mompié, este programa ofreció la posibilidad de comenzar una carrera en la música popular a jóvenes figuras sin demasiado recorrido.
Luego de tres exitosas temporadas, el espacio producido por RTV Comercial entró en una pausa y en 2018 no hubo edición. Un año más tarde fue confirmada la cuarta entrega, para la cual incluso se hicieron castings.
En octubre del mismo 2019, Paulo FG reveló en una conferencia de prensa que en esta nueva etapa contarían con el apoyo de Artex, la Egrem, la Agencia Clave Cubana y el Festival Fiesta de Italia, además del realizador Asiel Babastro, quien dirigiría los audiovisuales que resultaran del programa.
Sin embargo, luego de haber sido anunciada por todo lo alto, la cuarta temporada nunca llegó a las pantallas, y a día de hoy parece que, al menos por el momento, el proyecto no continuará.
Seis años después de su última emisión, sucedida en 2017, Cubalite ha rastreado a sus tres ganadores para saber qué ha sido de sus carreras durante todo este tiempo.
Karen Giselle Oduardo Díaz – 2015
La primera triunfadora de este concurso tiene 26 años, nació en La Habana y vive actualmente en Windhoek, capital de Namibia. Después de su victoria se presentó en Cali, Colombia, y Miami, Estados Unidos. Luego firmó un contrato exclusivo con la disquera Planet Records, sin embargo, todo no salió como ella pensó.
“Yo firmé lo que aparentemente era un contrato bueno, empecé a hacer música, videoclips y todo lo demás. Estaba bajo la tutela de Osmani Espinosa, músico y productor a quien le agradezco muchísimo, y la verdad es que mi etapa con ellos me permitió experimentar muchísimas cosas y viajar por Cuba, ya que antes había conocido otros países.
“Lo que pasa es que al yo ser inexperta, di mi consentimiento a ese contrato de exclusividad y, de todas las expectativas que tenía con ese trabajo, no llegamos a ningún lado. Creo que en parte fue por mal labor de la disquera, aunque no le echo la culpa por completo a Roberto Ferrante, su fundador. En mi cabeza yo no tenía claro hacia dónde quería dirigirme y eso también me afectó”, contó Karen en enero en uno de los videos de su canal de YouTube.
Más adelante, en 2020 llegó la pandemia de la Covid-19 y su situación se estancó. Más adelante se enteró de que Planet Records había colocado a otra artista muy talentosa en su catálogo y, aunque eso no le molestó como tal, el hecho de que le mintieran y la desecharan sin aprovechar todo su talento, la hizo decepcionarse mucho.
Tras un período de incertidumbre, ella comenzó su proyecto independiente, del cual su mamá actuó como representante. En ese entonces su desilusión vino de una de las empresas musicales de Cuba, cuyo director le ofreció varias evasivas en lugar de darle una oportunidad para probarse y ser contratada.
Luego de esos complejos momentos, en 2021 la artista se fue a la nación del sur de África junto a su novio. El 31 de diciembre de aquel año realizó su primera presentación allá. También desde entonces tiene un espacio en un restaurante cubano llamado Diversa.
“Empezar de cero en Namibia es muy difícil porque, a pesar de que puedo manejar el inglés, aquí se escucha mucho afro-house y otro tipo de géneros más producidos por DJ’s, los cuales no involucran el hecho de cantar. Por otra parte está el aspecto económico, o sea, que aquí tengo que invertir muchísimo más que en Cuba, y si hago eso y me dedico por entero a la música, entonces no podría ayudar a mi familia con el dinero que les mando ahora, por ejemplo”, confesó en una publicación de mismo año.
Karen extraña mucho la vida que tenía en su país natal, pues según ella se marchó justo cuando estaba empezando algo nuevo en su carrera, pero no tuvo la oportunidad de ver qué sucedería, puesto que lo dejó todo atrás. Eso, junto a la lejanía de sus seres queridos, la ha llevado a sufrir depresión en ocasiones y desconectarse de lo que más disfruta hacer, que es la música. No obstante, ha dicho que nunca abandonará su pasión.
Yulaysi Miranda Ferrer – 2016
Sobre esta talentosa joven te hablamos anteriormente:
Yulaysi Miranda: de «Sonando en Cuba» a maravillar a toda Hungría
Tras participar en Sztárban Sztár Leszek, popular concurso de talento e imitaciones en Budapest, Hungría, país en donde reside desde 2021, la cantante habanera de 32 años y madre de dos niñas ha seguido actuando.
En enero pasado lanzó junto a los Djs Timberos el tema Mi Son y meses después, en junio, acudió con su esposo, el violinista Gergő Krisztián Tóth, como invitada a la gala húngara del evento conocido como WCOPA, siglas inglesas que se refieren al Campeonato del Mundo de Artes Escénicas.
Antony Puig Lugo – 2017
El último en celebrar la victoria del conocido concurso fue este santiaguero oriundo de Palma Soriano. Hasta la fecha, Antony ha desarrollado una carrera en solitario bastante interesante, durante la cual se ha movido desde el son o la salsa hacia los géneros urbanos.
En el presente se encuentra trabajando en varios sencillos que ha estrenado regularmente, como son los casos de La Nota y Lalala, publicados en las últimas semanas. Hasta la fecha ha grabado también otros temas como Volveré, La Necesidad y Tu Juguete.
Por si fuera poco, ha podido realizar colaboraciones con artistas como Alex Duvall (Mucho con Bastante), Charly y Johayron (Tu Q’lo), Danita (Todo o Nada), Harryson (Tóxica), July Roby, Wampi (En Vivo), Alan & Fer X (Nada Formal), Darío Álvarez y el Team Havana (La Chica Pasarela), así como Bryan Omega y Menol Gavila (Perico), entre otros.
👉Si quieres recibir en tu WhatsApp los artículos que publicamos habitualmente sobre temas cubanos o la actualidad de personalidades dentro y fuera del país, únete a nuestro grupo:
De las que ganaron en Sonando en Cuba los que se quedaron en la isla han tenido mejor suerte.