Numerosos cubanos aseguraron contratos profesionales en la presente temporada de la Liga Mayor de Béisbol de Venezuela, la segunda en nivel de ese país. Aunque a algunos no les fue bien y ya fueron despedidos, como el artemiseño Yuniesky García y el villaclareño Javier Mirabal (ambos lanzadores), a otros les han salido mucho mejor las cosas. Las estadísticas hablan del buen trabajo realizado hasta ahora por los santiagueros Yoel Yanqui y Yoelkis Guibert, los camagüeyanos José Ramón Rodríguez y Dariel Álvarez y el espirituano Geisel Cepeda.
Entre todos los antillanos que han visto acción este año en ese circuito, solo dos debutaron en una liga profesional: el habanero Ariel Hechavarría y el matancero Armando Dueñas (jugó en torneos de España y Rusia, pero no tienen nivel rentado). A ellos dos se sumará dentro de varios días otro pelotero de la isla que nunca se ha probado en este exigente béisbol.
Rubén Valdés Expósito tendrá su estreno en un circuito extranjero, pues el club morocho Delfines de La Guaira decidió contratar sus servicios y debe incorporarse a la disciplina de este colectivo después del 3 de julio, día en que viajará a Venezuela, desde la isla. La información sobre esta firma, sin vínculos con la Federación Cubana, la divulgó hace algunos días Osniel Hernández, activo seguidor del equipo Tigres de Ciego de Ávila.
En su futuro elenco, Rubén será compañero del lanzador zurdo tunero Darien Núñez, único cubano en el roster desde el principio de la campaña. En anteriores ediciones, el experimentado pitcher artemiseño Raúl Valdés reforzó a esta novena.
El jugador de cuadro avileño arribará a ese certamen con experiencia en 14 Series Nacionales con los Tigres, y en calidad de refuerzo con Cienfuegos e Industriales —a los Leones los defendió en la segunda Liga Élite. Sus números globales lo dejan con promedio ofensivo de .277, 353 anotadas, 753 hits, 122 tubeyes, 41 jonrones, 395 remolcadas, 133 boletos y 240 ponches.
Sin discusión, la mejor temporada regular para el atleta de 35 años fue la última, en 2024, al lograr sus cifras más altas en anotadas (46), inatrapables (93), dobles (15), cuadrangulares (11) e impulsadas (60). Su average fue .327.
A principios de 2025, Valdés, al igual que otros peloteros avileños, pidió la baja del béisbol cubano, decisión que fue un duro golpe para el manager Danny Miranda de cara a la recién finalizada Liga Élite, campeonato que terminó ganando.
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