Pelotero cubano se fue a Dominicana con 15 años, regresó en 2020 y ahora arrasa en la Serie Nacional

3 min


0
Yassel Izaguirre. Foto tomada de su perfil en Facebook.

A veces las historias de redención son las más bonitas. Y la de Yassel Izaguirre es una de esas. Este muchacho tunero de 21 años se fue a República Dominicana siendo un adolescente, persiguiendo el sueño de las Grandes Ligas. Regresó menos de un año después sin contrato, sin firma, sin nada. Pero con algo que vale mucho más: ganas de demostrar que el talento estaba ahí, esperando el momento justo para explotar.

Y vaya que ha explotado.

Los números no mienten

Ahora mismo, el joven ocupa el quinto puesto en el departamento de average de la Serie Nacional, con un impresionante .429. Además de ello, ha pegado 12 dobles, dos triples y cinco jonrones. Ha recibido 19 boletos, ha remolcado 23 anotaciones y se ha ponchado en seis oportunidades. Solo seis.

Sus números avanzados son igual de impresionantes: porcentaje de embasado (OBP) de .540 (tercero mejor de toda la liga) y slugging de .831 (segundo del campeonato), guarismos que lo llevan a un OPS (OBP + SLG) de 1.371, también sublíder en dicho acápite. Para los que no están tan metidos en las estadísticas, eso significa que este muchacho se embasa más de la mitad de las veces que va al plato y, cuando conecta, lo hace con poder.

Pero no siempre fue así. Antes de la actual contienda, Yassel había representado a los Leñadores en dos series (62 y 63), pero apenas había recibido oportunidades. En esas justas únicamente fue al home plate en 68 ocasiones, recibió seis boletos, conectó dos dobletes, un jonrón y su average no superó los .250.

¿Qué pasó entre ese Yassel y este? Pues bien, pasó la madurez. Pasó el trabajo. Pasó la disciplina. Y pasó la convicción de que solo había que pulir un poco más el talento.

El viaje que no terminó como esperaba

Retrocedamos un poco: en septiembre de 2019, Yassel fue uno de los encargados de liderar la ofensiva cubana en el Campeonato Panamericano Sub-15 de béisbol, efectuado en la ciudad mexicana de Playa del Carmen. Los dirigidos por el habanero Reynier Madruga completaron la fase de grupos con balance de cuatro triunfos y una derrota ante Panamá. Luego, su paso por la Súper Ronda los envió a la discusión del tercer puesto frente a República Dominicana, vencedor en ese duelo.

A pesar de que los antillanos quedaron fuera del podio, consiguieron uno de los cinco boletos en disputa para el certamen del orbe de esa categoría, que debió celebrarse en 2020 en Tijuana, México. Pero la Covid-19 lo impidió. Y de todas formas, de haberse efectuado la justa, el jardinero Izaguirre no hubiese asistido, pues poco tiempo después de la lid de Playa del Carmen marchó del país hacia territorio quisqueyano.

Con 15 años, en esa nación permaneció menos de 12 meses. No firmó con ninguna organización de Grandes Ligas. Y en el segundo semestre de 2020, regresó a Cuba.

En su decisión de regresar influyó la compleja situación internacional generada por la pandemia, que en Dominicana también se sintió muy fuerte. Pero también influyó algo más: la certeza de que todavía tenía mucho que aprender, mucho que crecer, mucho que demostrar.

El regreso y la disciplina

Tras arribar a Cuba se mantuvo entrenando con mucha disciplina. Y 2022 fue muy intenso para él. Integrante de la preselección de los Leñadores rumbo a la Serie 61, primero participó en el Campeonato Nacional juvenil, donde fue el mejor bateador tunero, con average de .312, 15 anotadas, 29 hits, OBP de .471, tres dobles, un jonrón, 12 empujadas, 19 boletos y ocho ponches.

Después fue uno de los elegidos para defender a su provincia en el torneo Sub-23 de aquel propio año. Entre el segmento regular y la postemporada, el patrullero izquierdo promedió .431, con ocho anotadas, 25 imparables, OBP de .507, cuatro dobles, un triple, un jonrón, diez impulsadas, siete bases por bolas y ocho ponches.

Los números empezaban a hablar por sí solos.

En 2022 también conformó el elenco cubano que intervino en el Campeonato Premundial de Béisbol para menores de 18 años que tuvo como sede a Baja California, México, donde los nuestros fueron séptimos. Y hace unas semanas fue parte del equipo nacional sub-23 que asistió al Premundial de Panamá, donde Cuba se quedó con uno de los tres boletos rumbo al certamen del orbe que se celebrará en Nicaragua el año próximo.

Un futuro brillante

Yassel Izaguirre tiene 21 años. Todavía es joven. Todavía tiene mucho camino por delante. Pero lo que está haciendo en esta Serie Nacional no es casualidad. Es el resultado de años de trabajo, de disciplina, de no rendirse cuando las cosas no salieron como esperaba.

Porque hay algo que Yassel aprendió en ese viaje a Dominicana que no terminó como soñaba: el talento solo no alcanza. Hace falta trabajo. Hace falta paciencia. Hace falta creer en uno mismo incluso cuando los números no acompañan.

Y ahora, cinco años después de volver a Cuba, Izaguirre está demostrando que el viaje valió la pena. Que el regreso no fue un fracaso, sino el comienzo de algo grande.

Porque a veces, las mejores historias no son las de quienes nunca cayeron. Son las de quienes se levantaron.

Y Yassel Izaguirre se levantó con todo.

👉Si quieres recibir nuestros artículos de deportes y otros contenidos sobre ese ámbito en tu WhatsApp, únete a este grupo:
👉(Pincha aquí para unirte)

Anuncios
Anuncios
Anuncios

0 Comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

× ¡¡¡Contáctanos!!!