En la noche del 17 de abril del 2014, durante un recorrido por la Avenida 31, en la La Habana, la vida cambió para Patricia Ramírez y sus familiares. Estos, asentados en la provincia de Sancti Spíritus, recibieron la mala noticia del trágico accidente que sufrió la joven.
Patricia tenía 23 años y el trabajo soñado por muchos: era actriz y estaba en pleno rodaje de la telenovela Cuando el amor no alcanza, donde defendía el rol de Leida, pero a causa del infortunado suceso entró en estado neurovegetativo.
A 7 años del accidente que cambió la vida a la actriz Patricia Ramírez, ¿qué ha sido de ella?
Sobre su estado de salud, hace un año, se publicó en el periódico Escambray un amplio trabajo donde su madre, Nilda González, explicaba cómo era el día a día de su hija. “Su atención es las 24 horas”, “se comunican con el lenguaje de los ojos”, “parpadea dos veces y responde sí”, “la acomoda por si le molestan las escaras, “verifica si respira bien”, “tiene cierta percepción auditiva y reconoce mi voz”, “pararse frente a la cama y ver lo que está y pensar en lo que fue… es muy difícil”, fueron solo algunas de las frases más impactantes de aquel texto.
Entre los medios de comunicación, las redes sociales y demás, nunca se ha perdido la esperanza por Patricia y a cada rato circulan “noticias” o “rumores” sobre ella o, en ocasiones, simplemente se evoca a la actriz y su personaje en la telenovela.
Recientemente, se actualizó sobre su estado de salud desde la página de Facebook Patricia, joven actriz que clama por su regreso a la vida, espacio creado por personas cercanas a la familia para difundir información verídica. Ahí, quien escribió la última publicación, agradeció “infinitamente a todos los que a lo largo de estos 8 años y 5 meses no han dejado de pensar en Patry y se han preocupado por ella”.
Explicaron que “aún lucha, aunque en su mismo estado neurológico (mínima conciencia), pero lucha por darnos cada mañana su parpadeo y su presencia”.
Inmediatamente después del accidente, Ramírez sufrió largos días de terapia intensiva, de coma profundo y de tratamientos en el Centro Internacional de Restauración Neurológica (CIREN), no obstante, “con el pasar de los años, su salud se ha deteriorado bastante, las complicaciones se hacen cada vez más sistemáticas”, anunciaron ayer.
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