En la última producción que la había llevado a las pantallas en su país natal, Bailando con Margot (filme estrenado en 2016, dirigido por Arturo Santana), Mirtha Ibarra había defendido el rol de la acaudalada viuda Margot de Zárate, protagonista de aquel largometraje. Hace unos días, poco más de ocho años después del debut en los cines nacionales de dicha cinta, se ha conocido que la excelente actriz volverá a deleitarnos con un nuevo personaje.
La información trascendió a través del perfil en Instagram del actor Jorge Perugorría, quien está detrás del filme Neurótica anónima, en el cual también intervendrá Roberto Perdomo. Ya han comenzado los ensayos y el rodaje tendrá lugar durante el mes de agosto en la capital cubana, según hizo saber el capitalino.
En dicha ficción, basada en la obra de teatro homónima escrita por la propia Mirtha, Ibarra interpretará el personaje de Iluminada, mientras que el exoficial de Tras la huella se convertirá en Osvaldo.
De acuerdo con la web de Casa América, dicha pieza teatral, que ya se estrenó en España, «narra la vida de Dulce Rodríguez, acomodadora del cine Maravilla -uno de los más importantes de La Habana-, que inminentemente derrumbarán. Quien fuera profesora de literatura se ve reflejada en las divas mundiales de las películas proyectadas, cintas que ella estudió y analizó en sus clases.
«Dulce cree que pudo ser tan famosa como ellas, pero que nunca tuvo esa oportunidad. En la desesperación por el naufragio de ese sueño, el día anterior a la demolición del Maravilla, “convoca” a las divas internacionales Bette Davis, Joan Crawford, Vivien Leigh y Audrey Hepburn, a las cubanas Daisy Granados, Eslinda Núñez, Beatriz Valdés, y, a ella misma. Quiere que la “asistan”, aunque sea por una vez, para realizarse como artista», refiere el mencionado portal.
Por el momento no se ha sabido más sobre esta película que también tiene en su equipo de producción a Santiago García Galván, con experiencia en audiovisuales como Nido de mantis, Fátima y el Parque de la Fraternidad, Chef’s Table, El cartel de los sapos, además de varios videoclips.
Ibarra (San José de Las Lajas, 1946), quien durante varios años fue la pareja del inigualable cineasta Tomás Gutiérrez Alea, es una actriz que ha construido una sólida trayectoria en el séptimo arte desde que debutó con un pequeño papel en la aplaudida La última cena (1976), dirigida por quien se convirtió en su compañero de vida.
En su currículo aparecen más de 20 largometrajes, entre los que se cuentan Hasta cierto punto, Fresa y chocolate, Adorables mentiras, Guantanamera y El cuerno de la abundancia.
Shiralad, El hombre que vino con la lluvia y Los pasos hacia la montaña forman parte de lo poco que ha hecho en TV en Cuba. Según declaró en una ocasión, no le han ofrecido muchos roles interesantes para la pequeña pantalla. «Yo sí quiero trabajar en televisión y nunca más me han propuesto nada porque se ha creado toda esa atmósfera alrededor mío de que yo soy de cine nada más», agregó.
Durante los últimos años del pasado siglo e inicios del actual, Mirtha estuvo durante un tiempo fuera de su país natal y en España participó en la serie La verdad de Laura, coproducida entre Televisa y Radio Televisión Española y emitida entre enero y julio de 2002. En ese mismo país ha actuado en piezas teatrales y estuvo de gira por varios territorios de dicha nación con la obra Obsesión habanera, escrita, dirigida y protagonizada por ella.
Ha fungido también como realizadora del documental Titón: de La Habana a la Guantanamera.
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