Mucha controversia ha generado en territorio azteca la cantidad de peloteros extranjeros que integran los rosters dados a conocer antes de la jornada inaugural de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), el circuito veraniego de ese país que arrancó el pasado 11 de abril.
Para la actual contienda se permitió que cada elenco pudiera inscribir hasta 20 atletas foráneos en sus nóminas, lo cual implicaría que, en caso de que una escuadra llegara a esa cifra de importados, solo tendría espacio para menos nacionales.
Un texto publicado por el sitio Séptima Entrada indica que en las listas entregadas hay 320 extranjeros y 318 mexicanos, pero de estos últimos, solo 226 son nacidos en el país (73 poseen doble nacionalidad y 19 han sido naturalizados), por lo cual el 35% de los participantes tendría a la nación norteña en su partida de nacimiento.
El debate no se ha hecho esperar, pues, si por una parte se busca que aumente el nivel del certamen, el segundo más fuerte que se disputa en dicho territorio, solo superado por la Liga Mexicana del Pacífico; por otra, se frena el desarrollo de varios peloteros que ya no contarían con un torneo como este y deberían buscar fogueo en otros de menos caché, como los regionales de categoría generalmente semiprofesional.
Uno de los que hizo pública su opinión sobre este tema fue el cubano Henry Urrutia, quien lleva años residiendo allí y se ha establecido como uno de los mejores bateadores de los dos más fuertes circuitos aztecas. El pasado 14 de abril publicó en su perfil en Twitter lo siguiente: «Entiendo la molestia de peloteros nativos por la nueva estructura de la LMB, lo juro, porque sé que se merecen su oportunidad, pero hay jugadores que con la estructura vieja casi ni hacían equipo y nunca jugaban. Ahora culpan a la nueva estructura ¡Trabajen más duro!».
Aquella publicación generó varias críticas al inicialista y jardinero oriundo de Las Tunas y uno de los que le respondió fue Isaac Paredes, jugador de MLB nacido en Hermosillo que defiende los colores de Tampa Bay Rays. «Estoy seguro de que si tú fueras mexicano tampoco estuvieras en ningún roster. No te engañes, mijo», escribió el infielder que en la campaña pasada de Grandes Ligas pegó 31 vuelacercas.
Más tarde, el antillano, quien llegó recientemente a la cifra de 600 imparables en la LMB, publicó que muchos habían malinterpretado sus palabras y que luego explicaría en una transmisión en vivo su postura, pero cerró su cuenta de X -antes Twitter- donde apareció el post que desató la polémica.
Actualmente, el hijo de Ermidelio Urrutia defiende los colores de Saraperos de Saltillo en la mencionada justa y batea .308, producto de cuatro indiscutibles en 13 turnos. En dos temporadas en Grandes Ligas (2013 y 2015), ambas con los Orioles de Baltimore, en 34 partidos y 92 visitas oficiales al home plate dejó línea ofensiva (AVE/OBP/SLG) de .272/.287/.337, pegó un doble, un triple y un cuadrangular y remolcó ocho anotaciones.
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