El camagüeyano Humberto Bravo Riquene hizo historia el pasado año, en la primera edición de la Liga Élite del béisbol antillano. Él, además de ser el primero, fue el único jugador que se incorporó a ese campeonato después de jugar en 2022 en un circuito extranjero, la Serie A italiana, a través de un contrato independiente a la Federación Cubana.
Esto fue posible gracias al artículo 1.6 del reglamento del torneo, que plantea que los atletas contratados a título personal en el exterior, que no hayan abandonado delegaciones o contratos por la Federación doméstica; que no estén en términos de sanción y que posean pasaporte cubano o carné de identidad, podrán ser autorizados a jugar en cualquier fecha, con previa solicitud del pelotero a su provincia y con la venia de la Comisión Nacional.
Humberto militó en las filas de Ganaderos, equipo que a la postre finalizó en la quinta plaza en la etapa regular, y su rendimiento fue sobresaliente en los pocos encuentros que disputó. Tras participar en cinco compromisos y promediar .462, con seis hits, una empujada y dos boletos, el 24 de noviembre se informaron varias bajas y una fue la del agramontino.
Acerca de esa decisión, el timonel del conjunto, Héctor Huelga, declaró al narrador deportivo Evyan Guerra que el camarero no viajó a una gira y el cuerpo técnico determinó que no continuara en el elenco. “Para nosotros la disciplina es fundamental”, agregó.
Meses antes de la Liga Élite, se efectuó la Serie Nacional 61 y Bravo no intervino en ningún juego por encontrarse en Italia, donde se estrenó en un campeonato semiprofesional, con el club Itas Mutua Rovigo. En su escuadra lideró el average (.360), los hits (49), las anotadas (35), los triples (tres), el total de bases (63), el OBP (.457), el OPS (.920) y las bases robadas (23), terminó segundo en dobles (ocho) y boletos (21) y tercero en impulsadas (21). Sin dudas, el mejor artillero de la entidad.
Tras fijar esos números, el pelotero de 30 años no necesitó convencer a Itas Mutua Rovigo para que le renovaran el contrato este año, por lo que repite como el extranjero de la organización. Se encuentra en Italia hace más de diez días y ya debutó en la pretemporada.
En ocho contiendas en el principal certamen beisbolero de Cuba, batea .313, con 473 inatrapables, 49 dobles, cinco jonrones, 139 empujadas, 69 bases robadas en 106 intentos, 212 bases por bolas y 172 ponches. En cinco temporadas promedió más de .300, en una rebasó los 100 incogibles y en otra se quedó a tres del centenar.
Fue incluido en el equipo antillano que participó, a inicios de julio de 2017, en el Torneo de Rotterdam, Holanda, comandado por el villaclareño Vladimir Hernández.
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