Días atrás publicamos un material sobre el lanzador pinareño Erly Casanova y su aparición como bateador en la División 1 del béisbol de Francia. El hijo de Luis Giraldo, el 20 de junio, defendiendo la camiseta de las Barracudas de Montpellier, empuñó el madero en la parte alta de la octava entrada y se ponchó. En ese partido, ganado por su escuadra 2-1 ante el equipo Metz Cometz, el diestro se anotó el salvamento, luego de cuatro episodios, con tres imparables, una carrera limpia y siete ponches.
Hoy hablaremos sobre otro pelotero cubano, que jugó en la Serie Nacional hasta la edición pasada, pero este, habituado toda su carrera deportiva a batear, debió escalar el montículo recientemente en su segunda experiencia profesional.
El último capitán de Industriales, Stayler Hernández Apesteguía, es uno de los refuerzos extranjeros de los Atléticos de Bologna en la presente contienda de la Serie A, categoría principal de la pelota italiana. Desde su debut con el club el 30 de mayo, no había hecho otra cosa que fungir como artillero y defender, sin embargo, el 1 de agosto eso cambió.
Ese día, en el encuentro de su plantel frente a Ciemme Oltretorrente BC, el habanero relevó en la novena entrada a su antiguo compañero de los Leones, Frank Montieth Herrera, quien trabajó durante ocho innings, con tres hits, ninguna carrera y siete ponches. El desafío marchaba 3-0 favorable a los boloñeses.
Stayler, ubicado en la alineación como tercer bate e inicialista —disparó un imparable en tres oportunidades y negoció un boleto—, en su primera presentación como pitcher en el circuito italiano, permitió par de indiscutibles (de Sebastiano Catellani y Stefano Giannetti) e igual número de limpias, regaló una base por bolas y ponchó a un contrario. Realizó 25 lanzamientos, de ellos 15 strikes, y dominó en fly al jardín central al utility holguinero Miguel Céspedes, debutante en este campeonato.
A pesar de aceptar esas dos anotaciones, el zurdo de Habana del Este completó el último inning y se apuntó el rescate.
Tras leer las últimas líneas, probablemente usted tenga una interrogante que pase a gran velocidad por su cabeza: ¿Stayler Hernández habrá lanzado en su paso por la Serie Nacional? Le digo en breve.
Antes de anunciar su retiro del béisbol antillano, acumuló 18 temporadas con Metropolitanos e Industriales, con un promedio ofensivo histórico de .298, además de 1305 imparables, 254 tubeyes, 105 jonrones, 55 triples y 651 impulsadas.
Representó a Metros en seis campañas, destacándose como uno de sus mejores bateadores, pero en la edición 45 (2005-2006), bajo las órdenes de Juan Padilla, vino del bullpen dos veces. Tuvo actuación en dos episodios, le conectaron par de sencillos, se enfrentó a siete bateadores, no le fabricaron carreras y dio un pelotazo.
Ese fue su efímero desempeño desde el box, por lo que, con su salida del 1 de agosto en Italia, retornó a los menesteres de serpentinero 16 años después.
Hernández, quien en 2019 militó en la desaparecida liga Can-Am, con los Capitales de Quebec, actualmente batea .359 con los Atléticos, en la división élite italiana, además de 28 imparables, nueve dobles y 10 remolcadas.
Fácil de entender, porque es bien pagado y se le pide a cambio rendimiento, por eso cumple, esa es la esencia de todo, esfuerzo profesional por un justo pago, por eso hay crisis en el béisbol cubano, irónicamente, si confirmas un equipo exclusivamente con los que están jugando fuera en ligas internacionales, tendría Cuba el mejor equipo del planeta, invencibles, pero Cuba es como el béisbol, debe cambiar la mentalidad y todo mejora.