Oh, oh baby
Oh, oh baby, oh
Oh, oh baby
Oh, oh baby, oh
… y así sigue Lying Together, el tema de FKJ (French Kiwi Juice). Fue la primera canción que publicó La Nave Radio.
Ese 21 de junio de 2020, a la lista de recomendaciones de música para escuchar y descargar se sumó Winding Rhodes, de Robot Orchestra; I should be dreaming de Zacari y Josh Jaramillo; Fever, de Brasstracks, y El Viaje, de Harold López-Nussa. Aparecía, además, el mensaje: “esta nave acoge a todos, no hay condición de abordaje, viajemos a donde hay sonidos que pocos conocen, pero enamoran sus ondas. Ahora somos pocos, pero hay espacio de sobra”.
Así, los «pilotos» emprendían su trayecto e iban sumando cada vez más «tripulantes» a su nave.
El 31 de julio recomendaban Can I Kick It?, de A Tribe Called Quest, con información referente a este grupo, que “no fue el más popular ni el más exitoso de los que estuvieron activos en los 90”, pero resaltó “desde un punto de vista artístico, por la gran fuerza creativa del hip hop de la costa este”.
El pasado viernes 21 de agosto, por ejemplo, empezó bien arriba. A las 9:00 AM, subieron la canción Tártaro, de Buscabulla; al filo de las 12:oo M estaban proponiendo Zebra, de Solee, y a las 6:00 PM recomendaban el álbum Ventura, de Anderson Paak, con información sobre el disco y sus sonoridades: se referían al «estilo único de cantar y rapear» y a la «versatilidad de estilos», «un excelente tributo al soul y al funk con aire de hip-hop». Cuando daban las 9:00 PM, publicaban Wall in the sky, de Bonobo y Bajka. Para cerrar el día, proponían, a las 11:oo PM, Identidad, de Haydée Milanés e Ibeyi.
…pero, ¿de qué estamos hablando? Desde Cubalite nos sumamos al recorrido que propone La Nave Radio, un canal de Telegram cuyo principal objetivo es que se viaje a través de los sonidos, de la música de los más variados géneros y estilos. “Este es un medio de transporte que llega a niveles y lugares desconocidos e inalcanzables”, nos comenta Ernesto Escalona, uno de los creadores de este proyecto.
Sin embargo, lo cierto es que lo que hoy disfrutamos como una idea consolidada, con un pensamiento y estructura detrás, surgió “producto de los días, noches y madrugadas en que no salíamos de la rutina por culpa de la cuarentena”.
“La música es mi mejor aliada, y lo fue durante esas fechas. Al principio del confinamiento, decidí, a través de estados de WhatsApp, empezar a recomendar las canciones que escuchaba y quería que mis amigos las descubrieran”, precisa Ernesto que, aunque no se creía único en el mundo con esta actitud, jamás imaginó que otros amigos suyos también hacían lo mismo, e incluso coincidían en algunos temas.
“Da la casualidad que el Dj de FAC, Darian Perdomo (Cuzco de Jota), estaba haciendo lo mismo con sus contactos y pasamos a recomendarnos mucha música entre nosotros y luego las subíamos cada uno”.
Hasta el momento, solo eran dos locos en esa misión «espæcial» (esto no es un error tipográfico).
“Luego apareció Héctor, con el que habíamos coincidido también en fiestas en las que yo animaba y ellos ponían la música. Él tenía un grupo al que ya le había puesto La Nave radio y propuso hacer un canal en Telegram para poner la música que estábamos recomendando en nuestros estados”. Esto daba solución a uno de los principales problemas que venían presentando: “muchas personas nos escribían que les gustaba la música, pero querían saber dónde podían descargarla, y nosotros les recomendábamos dónde buscar, pero a veces esto se dificultaba por el acceso, los megas…”
Para concretar la idea inicial de La Nave Radio solo bastaron algunos mensajes de un chat grupal, pero más adelante se reunieron, “siguiendo todas las medidas, el hipoclorito, el cloro en las manos, los pies, el nasobuco… y tuvimos un pequeño encuentro para acordar cómo sería el funcionamiento”.
“Nuestro principal propósito era que la gente escuchara y disfrutara de la música que nosotros oíamos y, a aquellos que no la conocían, queríamos abrirles una puerta a nuevos sonidos”.
En La Nave hay música de todo el mundo (Bomba Estéreo, Thundercat, Yissy & Bandancha, Chucho Valdés, Daymé Arocena, Led Zeppelin, Metallica, Soda Estéreo, Mac Miller son solo algunos de los artistas que se incluyen en sus listas de recomendaciones). “Comenzamos colocando alrededor de seis temas diarios, en horario comprendido entre 9:oo AM y 11:00 PM. Más que un canal, se asemeja a una emisora de radio”.
Entre los géneros musicales más frecuentes: nujazz (mezcla de elementos jazzísticos con estilos como el funk, soul y música electrónica), afrojazz (en ocasiones afro-cuban jazz; fusión entre las corrientes latinas del jazz y bebop), afrobeat y subgéneros de la música electrónica como trip hop, traphousejazz, tech house y deep house.
Sin embargo, a la idea inicial del proyecto, con el tiempo, se le añadieron “otras cosas locas”.
“Tenemos un grupo para el intercambio con los suscriptores, para que den su opinión y recomienden canciones. Con los debates generados ahí, nos dimos cuenta de que teníamos que ampliarnos a las demás plataformas digitales y así comenzamos en Instagram y Youtube. A raíz de esto se suma otro hermano, amante de la buena música y muy buen Comunity Manager, Abel Eduardo, que nos ayudó con las infografías y la visualidad para el feed de Instagram”.
Ya eran cuatro en la tripulación de ese viaje musical.
“Luego creamos los Martes Temáticos y los dedicamos a temas específicos, no precisamente a géneros musicales como tal. Ahí hemos tenido desde música cubana salseada, indie, francesa, asiática hasta reguetón”. No son excluyentes de ningún género.
“Otra idea son los Jueves TBT, para recordar temas icónicos. Con esto hacemos que los jóvenes y adolescentes que nos siguen conozcan lo viejo y se interesen por ello también”.
Hace poco estaban “chapisteando la nave” y querían conocer el criterio de sus seguidores en cuanto a nuevas opciones que implementarían. “Las encuestas y recomendaciones son cosas que no comenzaron desde el inicio, pero luego nos fueron dando una fuerza y un reconocimiento grandísimo entre los usuarios”.
A partir de los votos, determinaron que la audiencia estaba interesada en playlists recopilatorias con lo mejor del mes, las cuales están disponibles en su canal de YouTube. “Además, creamos la lista de reproducción de la nave en Spotify y Apple Music para llegar por todos lados”.
“Ya cerrando el círculo, recientemente se nos sumó otro amigo, Frank Calzadilla, que nos ha ayudado con la promoción y recomendación de música. Somos cinco, los mismos que casi siempre andábamos juntos y vinculados a los mismos proyectos”. Héctor González, Darian Perdomo, Abel Eduardo, Frank Calzadilla y Ernesto Escalona son los pilotos que hacen posible que cada día se viaje. “Como te puedes imaginar, recomendar varias canciones a diario, que entren en la cuerda del canal y hacer cosas novedosas no es fácil para una solo persona. Allí aportamos todos”, alude Ernesto a la fortaleza del trabajo en equipo.
“Tratamos de que los términos que usemos estén relacionados con la onda de viajar. Nosotros nos decimos pilotos”. Entre los emojis que acompañan cada publicación, además de las clásicas manitos con el pulgar hacia arriba y hacia abajo, existe un cohete para indicar si el tema realmente te hizo viajar. “Ahora tenemos a Gagarin, que es como un administrador digital o una base de datos para almacenar las recomendaciones que nos sugieren los seguidores, para luego ir buscándolas y publicándolas”.
“Empezamos el 21 de junio y, hasta ahora, tenemos más de 600 suscriptores y estamos muy orgullosos de ello, pero seguimos trabajando para llegar a más usuarios y, bueno, después de que salga esto… (se refiere a este texto que acabas de leer)”. Agrega tres emojis de fuego a su último mensaje.
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