Primero lo intentó en septiembre de 2012 y no pudo como local en la ciudad de Ratisbona. Después repitió el mismo proceso, en marzo de 2016 en Mexicali, pero tampoco logró clasificar. Esas han sido las dos oportunidades del conjunto nacional alemán de incluirse en el Clásico Mundial de béisbol. La próxima semana intentarán por tercera vez buscar un boleto para el prestigioso evento y sus integrantes esperan que funcione el viejo adagio que reza “a la tercera va la vencida”.
El conjunto alemán aparece en el Grupo A, junto a Brasil, Francia, Alemania, Nicaragua, Pakistán y Sudáfrica, y el debut de los teutones está previsto para la noche del viernes 13 contra el plantel galo en Arizona, de acuerdo con la página oficial del evento. Según confirmó a Cubalite una fuente cercana al equipo dirigido por Steve Janssen, el único cubano en la plantilla es el conocido veterano Enorbel Márquez Ramírez, quien estará en su tercer PreClásico.
En la primera participación de 2012 como anfitrión, fue el abridor ante Gran Bretaña en una de las semifinales y se llevó el triunfo con marcador de 16-1 —Ko en siete entradas. Durante seis episodios se mantuvo propinando cero hit cero carrera, hasta que llegaron los imparables de Albert Cartwright y Chris Berset. La única anotación recibida fue sucia, mientras lideró ese certamen en ponches (ocho) y WHIP (0.29) y se anotó el único juego completo.
Posteriormente, en la segunda edición de 2016, perdió el primer choque de su elenco contra Nicaragua. Entró a trabajar en el décimo inning, con ventaja de una carrera, pero soportó tres imparables y las dos anotaciones limpias que decretaron la victoria de los nicas 4-5. En el segundo encuentro de los germanos (derrota de 3-15 frente a República Checa) no tuvo actuación.
El zurdo de Palma Soriano, en Santiago de Cuba, después de lanzar durante cuatro temporadas en la Bundesliga, en 2007 debutó con la selección nacional de Alemania, en el Campeonato Europeo de Barcelona, España, donde fijó marca de 2-0 y efectividad de 2,00, que le sirvieron de trampolín para integrar el All Star de la justa como mejor pitcher de su mano. A partir de ese torneo y hasta la actualidad, el indómito ha militado como jugador en casi todos los elencos teutones que se han conformado para concursar en certámenes de primera categoría.
Mencionar todos los torneos que cuentan en su aval es tarea ardua, pero entre los principales están: Copa Mundial (2007, Taipei de China); Clasificatorio Olímpico (2008, Taipei de China); Copa Mundial (2009, Europa, obtuvo la única victoria de su equipo); seis Campeonatos Europeos (2007, 2010, 2012, 2014, 2016 y 2019) y los dos PreClásicos mencionados. Muchos pueden recordar unos de los triunfos más importantes en la carrera de Márquez con la selección: el 14 de julio de 2018 venció a Cuba en la Semana Beisbolera de Haarlem, al encargarse de los últimos tres actos, con un hit, un boleto y tres ponches.
Enorbel cumplirá el 11 diciembre 46 años y sigue demostrando que todavía posee estamina para representar a su segunda patria. Jugó en tres temporadas de la Serie Nacional (2000-2003) como parte de la histórica Aplanadora santiaguera, con balance de 6-5, un rescate y promedio de carreras limpias de 6,50.
Márquez se encuentra en Cuba por estos días y de aquí volará hacia Arizona, sede del clasificatorio. “Llevaba cuatro años sin venir y viajé para visitar a los viejos y a mis hermanos. También aproveché para prepararme con vistas a este torneo, ya que es invierno en Alemania. He entrenado bastante aquí, en San Luis, donde viven mis padres”, declaró a Cubalite.
Como dije antes, el santiaguero es el único antillano en el roster alemán, pero existe otro compatriota con méritos suficientes para estar entre los elegidos, sin embargo, una vez más, quedó fuera de los planes de quienes dirigen el béisbol en ese país.
Luis Santa Cruz, de padre cubano y madre alemana, nació en Alemania pero toda su vida ha tenido un vínculo muy fuerte con la pelota de la Isla. Con 12 años, su padre, Lenin, lo envió a Cuba y participó en el Campeonato Provincial habanero, categoría 13-14 años, representando al Cerro. Ha estado con equipos germanos en categorías menores y posee siete contiendas en el circuito más elevado del béisbol teutón con estadísticas positivas.
“Luisito tiene la calidad suficiente para estar en ese equipo, es mi opinión. No sé por qué no lo llevan, pues él ha progresado bastante, ha hecho un trabajo defensivo buenísimo y al bate está con más fuerza, con conexiones largas. Ahora mismo no hay un camarero alemán mejor que él, tanto al bate como al guante. Lo de Luis no me lo puedo explicar, tiene todas las herramientas”, expresó a nuestra revista el habanero Arlen Barrera, amplio conocedor de la pelota alemana, con más de dos décadas de experiencia como jugador y entrenador.
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