Gian Moisés Palacios Martínez está por hacerse un nombre en la pelota cubana. Todavía no ha lanzado un envío en la Serie Nacional, pero, a partir de agosto, cuando comience la contienda 59, el lanzador zurdo matancero de 23 años tendrá su debut en ese campeonato, con Pinar del Río, equipo que lo recibió después de que el yumurino estuviera siete años tratando de representar a los Cocodrilos en el principal espectáculo deportivo de nuestro país, sin éxito alguno. Sin embargo, a puro tesón, el cardenense cumplirá lo que él mismo define como uno de los pasos más importantes de su vida.
La buena nueva la confirmó él mismo en su perfil de Facebook mediante una interesante publicación que pone al descubierto, aunque tímidamente, algunas de las miserias que enfrentan numerosos jugadores cubanos en su afán de estrenarse en la Serie Nacional, un campeonato que, aunque notablemente desmejorado, todavía sigue despertando pasiones.
Aunque las lamentables interioridades de un equipo de béisbol quienes mejor las dominan son los propios atletas, existen situaciones bien conocidas por la afición, que se arrastran desde las categorías inferiores hasta el principal nivel.
El abanico no es escaso y, por solo mencionar algunos, ejemplos están el nepotismo; la preferencia hacia peloteros cuyos padres o familiares tienen cierto poder económico o social; prematura desconfianza en atletas que no han desarrollado todas sus capacidades; reiterado empleo de determinadas figuras cuando hay otras en la banca, sin apenas chances y con el talento necesario para hacerlo bien; humillaciones públicas o la siembra de difamaciones a espalda de los peloteros. Todo un terreno pantanoso que obliga a andar con pies de plomo.
Gian Moisés escribió que, después de tanto batallar, por fin dio un paso importante en su vida: poder jugar en la Serie Nacional, y aunque uno de sus grandes sueños era defender la camiseta de Matanzas, por razones ajenas a él, no pudo alcanzarlo tras siete años que estuvo dándolo todo por obtener esa meta.
Añadió que fueron momentos de mucho dolor, lágrimas y tantas decepciones para su familia y personas muy allegadas a él. “Son cosas muy difíciles. Para aquellas personas que piensan que saben cómo es el béisbol, solo lo conocen por fuera, porque por dentro es un mundo oscuro, donde lo que más domina es la traición y lo único que puedes hacer es sobrevivir a toda costa. Decidí tomar otros aires y se los juro, nunca pensé que tantas cosas positivas me pasaran desde que me fui de mi provincia y mucho menos integrar un equipo donde está el mejor pitcheo de Cuba”, aseguró.
Palacios, quien lanzó en tres partidos con Matanzas hace dos años en la IV Serie Nacional Sub 23, dijo que es un privilegio enorme competir por Pinar del Río, lo que le demuestra que pudo hacerlo por su provincia, “pero nadie me ayudaba, me tiraban al abandono como si fuera un cualquiera, me envenenaban y me ofendían mucho a mi espalda, cuando yo lo que más quería era que me ayudaran, pero todo eso es pasado. Ahora aquí me siento como en casa. Desde que llegué me ayudaron mucho y, sobre todas las cosas, CONFIANZA.
“Por eso aquí me quedo y aquí echaré el resto, guste a quien le guste y pese a quien le pese…y no me conformo nada más con integrar el equipo de Pinar del Río, voy por más, integrar el equipo Cuba y muchas cosas más. Siempre voy por más. Siempre voy a estar agradecido de por vida con todas aquellas personas que me apoyaron desde el principio, sobre todo a una persona en especial que me aportó mucho emocionalmente”, afirmó el pitcher zurdo quien se apuntó la cuarta victoria de Cárdenas en la pasada Serie Provincial yumurina, 6-3 frente al elenco de Martí.
Un excompañero suyo en la EIDE Luis Augusto Turcios Lima dijo sobre Gian Moisés a Cubalite que era un lanzador de muchas perspectivas por su rápida velocidad, incluso en determinada categoría más veloz que el siniestro Cionel Pérez, actualmente con la organización Astros de Houston.
A pesar de esa virtud, pocas veces conformó el conjunto matancero, debido a su descontrol, por lo que efímeras fueron sus actuaciones en los cadetes y juveniles. “Por eso quizás perdió confianza un poco en Matanzas. Ahora veo que hizo equipo en Pinar del Río. Allá va a mejorar mucho porque están los mejores entrenadores de pitcheo de Cuba”, declaró la fuente.
Éxitos deseamos para el zurdo Gian Moisés Palacios en su primera temporada en la Serie Nacional, sin importar que sea una provincia ajena la que represente. Lo importante es jugar pelota, ya se ha dicho.
Es una lastima pero si pasa todas estas cosas desde las categorías tempranas me toca de cerca con mi hijo de 11 años desde los cinco años practica el béisbol en sus diferentes categorías pero no ha tenido la suerte de caer bien de momento un día es bueno y al otro no hace equipo nada señor dinero puede mas. Suerte y lucha por tus sueños
Lamentablemente esto no oasa solo en la pelota pasa en casi todos los deportes colectivos (El abanico no es escaso y, por solo mencionar algunos, ejemplos están el nepotismo; la preferencia hacia peloteros cuyos padres o familiares tienen cierto poder económico o social; prematura desconfianza en atletas que no han desarrollado todas sus capacidades; reiterado empleo de determinadas figuras cuando hay otras en la banca, sin apenas chances y con el talento necesario para hacerlo bien; humillaciones públicas o la siembra de difamaciones a espalda de los peloteros. Todo un terreno pantanoso que obliga a andar con pies de plomo.)
Que le vaya muy bien en la serie nacional para que matanzas vea lo que se perdio.bendiciones