En mayo de 2016 trascendió que la Comisión Provincial de béisbol de Sancti Spíritus suspendió al pelotero Yankiel Mauris Gutiérrez por cuatro años por abandonar el equipo yayabero durante la preparación para la Serie Nacional Sub 23. La medida, bastante exagerada por cierto, parecía que era la respuesta a un intento de salida ilegal del país del jugador de 20 años, vía por la que numerosos peloteros antillanos han marchado de la Isla para perseguir la ilusión de un contrato profesional.
A finales de marzo de 2017, ya asentado en República Dominicana, puente usual para peloteros cubanos en pos de firmar con franquicias de las Grandes Ligas, recibió una noticia que le acomodaba un poco el camino que inició cuando salió de Cuba: fue declarado agente libre y las expectativas crecieron.
Sin embargo, hace poco, el pitcher derecho recogió sus bártulos en suelo quisqueyano y regresó a su provincia natal, donde entrena por estos días en el estadio José Antonio Huelga, cuartel general de los Gallos y sitio que atestiguó buena parte de sus dos temporadas, en las que lanzó 118 entradas, ganó cuatro juegos, perdió nueve, salvó siete, trabajó para efectividad de 4.19 y se apuntó 77 ponches y 53 boletos.
A pesar de no tener números que impresionan, el espigado lanzador contó con la suerte de que en sus dos contiendas sus facultades llamaron la atención de los cuerpos de entrenadores de Granma, en la contienda 54, y en la siguiente de Las Tunas. Sus 28 presentaciones como refuerzo fueron en calidad de relevista, rol al que se aclimató con más efectividad durante su estancia en la Serie Nacional, puesto que solo una vez recibió la bola para abrir.
Con 23 años, Yankiel retornó a Cuba luego de conocer el crucial acuerdo firmado por la Federación Cubana de béisbol y la MLB en diciembre pasado. En República Dominicana, si algo hizo, fue entrenar fuertemente cada día para despertar la atención de los scouts, fin que no logró, pues solamente en topes pudo lanzar el oriundo del municipio de Taguasco.
Sus metas más próximas son enrolarse en la Serie Provincial espirituana y luego contribuir al conjunto de su territorio en la Serie Nacional Sub 23. Aspira a ser un miembro más de los Gallos para la venidera temporada, impulsado más todavía por el excelente resultado que dejaron en la pasada contienda, al terminar con la medalla de bronce.
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