Entre el 16 y el 21 de septiembre tuvo lugar en territorio alemán la primera ronda de clasificación rumbo al venidero Clásico Mundial de Béisbol. Esa justa, donde obtuvieron sus cupos para el magno evento las escuadras de Gran Bretaña y República Checa, contó con participación de peloteros cubanos, sobre todo en la selección española, como publicamos en su momento en nuestra página, pero también en el elenco francés.
Sin embargo, apenas se habló en los medios sobre la presencia de un entrenador oriundo de la mayor de las Antillas, quien integró el plantel ibérico como coach de banca. Se trata de Néstor Pérez Alonso, hijo de Néstor Pérez Suárez, único cubano en el Salón de la Fama del Béisbol Español.
Este año, él dirigió el equipo Augusta GreenJackets, sucursal de Clase A, perteneciente a la organización de los Bravos de Atlanta, y a inicios de 2022 fue galardonado con el Premio Bobby Cox, entregado al manager que mejor representa los valores de esa entidad del este de la Nacional, tras su trabajo con el elenco que disputó la Florida Complex League en 2021.
El nacido en Cuba en 1976 solo disputó una Serie Nacional (1994-1995) con Matanzas, en la que tuvo cinco hits (un doble) en 18 turnos, para un average de .278. Posteriormente salió del país y firmó con los Rays, franquicia a la que representó desde 1998 hasta 2005, sin superar la barrera de AA. Ese mismo año llegó a los Rockies de Colorado y puso punto final a su recorrido por las Menores. Durante ocho campañas en los sistemas de granjas de la Gran Carpa, dejó una pobre línea ofensiva de 241/.290/.281, con 73 tubeyes, cinco triples, dos vuelacercas y 180 remolcadas.
En varias ocasiones formó parte de la selección nacional española, con la cual alcanzó el bronce en el Campeonato Europeo de 2003. Dos años más tarde, en una nueva edición de ese torneo, integró el Todos Estrellas como mejor torpedero y terminó tercero en empujadas, empatado con el neerlandés Percy Isenia, con 10 propulsadas. Su novena repitió medalla en esa ocasión y también en 2007, donde él igualmente integró el combinado.
Además de ello, jugó varias campañas en la División de Honor de esa nación del Viejo Continente y fue uno de los bateadores más consistentes del circuito con los Marlins de Tenerife, club que había fundado su padre y cuyo estadio hoy lleva su nombre.
En 2013 disputó el Clásico Mundial de Béisbol con España, edición que marcó el debut de esa escuadra y también su única participación hasta la fecha en dicha competición. Tras el término del certamen puso fin a su paso por el equipo del que fue capitán desde 2008 y con el que disputó 75 encuentros.
Antes de dicha cita había trabajado como entrenador de selecciones de ese país en categorías inferiores y desde 2013 ha actuado como coach y manager en el sistema de los Bravos de Atlanta. Como timonel en esa franquicia, según el sitio especializado Baseball Reference, entre 2016 y 2021 (dirigió durante tres años al elenco GCL Braves, en una campaña a Danville Braves y en igual lapso a FCL Braves), acumuló foja de 129 triunfos y 153 derrotas.
👉Si quieres recibir nuestros artículos sobre deportes en tu WhatsApp, únete a uno de los grupos de Cubalite Deportes (Pincha aquí para unirte).
0 Comentarios