—No tenía una palanca. Eso fue lo que pasó…
Alex Otaola cuenta, vía WhatsApp, esa primera vez que, en Cuba, le dijeron que NO…
—Traté de entrar al ISA en actuación, pero no me aceptaron. Entonces regresé a Camagüey y comencé a trabajar en el Dramático.
La otra ocasión fue poco después, en su ciudad natal, cuando quiso entrar al pedagógico en la especialidad de Artes Plásticas. Luego de aprobar todos los exámenes, el director de la escuela lo llamó para informarle que no lo aceptaban…
—Me citó en su oficina y me dijo que allí no querían maricones de mierda. Entonces me rompió en la cara los papeles de mi solicitud.
Esa historia terminó con una acusación en tribunales, pero no pasó nada con el funcionario. Nadie se pronunció. Sin embargo, ese hecho despótico zanjó las aspiraciones académicas de Alex.
—Mi época fue muy complicada respecto al tema gay. Yo nací en una familia homofóbica, crecí en una sociedad homofóbica y estudié en escuelas homofóbicas. Uno tenía que aprender a vivir con eso, que los compañeros de clase se burlaran, te dijeran: “dale, pájara, pajarita”.
En los audios de WhatsApp la voz de Alex suena idéntica a cuando lo escuchas hablar en su programa; igual a cuando decía “¡Pink Gun!” con cierta insidia, pero más calmado. Algunas atenuaciones en su discurso nos indican que Alex, cuando no aparece en Hola Ota-Ola es una persona más tersa. Que habla todavía con su cadencia camagüeyana y con reserva porque igual, luego del puñetazo machista de Yomil, las ofensas de Chocolate MC y el hijo de Haila y, más recientemente, la disputa legal con Descemer Bueno, ha tenido que tomar precauciones para que nadie sepa que, también, es alguien amable. Quizá porque lo hizo antes en Cuba y no le salió bien eso de ser un tipo cándido, tomó el hábito del hacha y le dio filo con la palabra…
Para ser alguien a quien tantas veces le dijeron que NO, a Alex Otaola le ha ido bien…
—Me fui de Cuba porque estaba cansado, porque allá una persona con talento no prospera solo por ser talentosa. Siempre depende de algo, o de alguien más. Por eso me fui, para ganarme las cosas solo y que la gente me reconozca por mi trabajo. Desde que llegué aquí soy mejor persona.
Además de sus aspiraciones profesionales, en su decisión de abandonar el país también influyó el tema político, su rechazo al contexto nacional de corte realsocialista, y a nombres que Otaola mencionaría con todos sus apellidos, aunque no quepan aquí…
—Decir yo no pertenezco a este lugar [Cuba], lo dije siempre, desde que tengo uso de razón. Cuba no era donde quería crecer profesionalmente. El mundo es más grande y diverso de lo que allá se nos muestra.
Por eso Otaola se fue. Llegó a Estados Unidos en diciembre de 2003; el 13 de febrero de 2004 ya trabajaba de cajero en una tienda. Sin miedo, con marcha fija, trabajó en hoteles y restaurantes, en telemarketing…
—Incluso abrí un restaurante, pero luego lo cerré.
Alguien dado al arte, a sus propósitos, siempre busca ese acercamiento a la posibilidad expresiva. Para Otaola estaba claro que lo suyo era los medios de comunicación, la imagen televisa. Recordemos que en Cuba había hecho teatro, además, fue actor de voz en dramatizados de Radio Progreso; trabajó en doblaje e incursionó en la televisión. Todavía puede verse en reposiciones de la serie Blanco y Negro, ¡No!
—En 2008 o 2009 (no recuerdo bien) hice un casting en Telemundo, para un personaje pequeño en la novela El rostro de Analía. Después comencé a hacer shows, como Quién tiene la razón, además de mi papel en el programa de Alexis Valdés…
Los cubanos recordarán a Otaola en Paparazzi TV, show de farándula que, por su enfoque controvertido, fue cancelado por la productora Mega TV. La influencia de Otaola en el programa (y la polémica que generaba, en flujo doble, desde el show a sus redes sociales y a la inversa) le abrió las puertas a otros proyectos.
—Yo siempre he sido muy difícil de controlar, verbalmente. Yo siempre digo lo que pienso. Por eso, decidí comenzar mi propio proyecto: Qué Monada! Yo rentaba el espacio y transmitía el programa una vez a la semana, los domingos.
Después de tres temporadas, el financiamiento cayó, tampoco apareció ningún empresario interesado en invertir en su show. Podemos decir que, desde su partida, por vez primera más allá de la Isla, Alex Otaola estuvo otra vez cerca del fantasma del NO…
—Estaba sentado en mi casa, sin trabajo. Entonces decidí hacer una versión online de Qué Monada! desde la sala de mi casa, solo con un amigo.
Una semana después, Otaola recibe una llamada de la directiva de Diario de las Américas, que estaban interesados en transmitir el show en sus redes. Meses después, por problemas de producción, cancelan el programa definitivamente…
—Me quedé sin trabajo, sin carro, sin casa. No tenía nada. Fui a vivir con una amiga. Fue en ese tiempo cuando me llamaron los de Cubanos por el Mundo…
La propuesta era retomar Qué Monada!, en su idea original. Pero en ese momento el otro conductor que antes trabajaba en el show ya no estaba disponible ni le interesaba la idea.
—Al final le dimos la vuelta, y creamos un nuevo proyecto, ¡Hola! Ota-ola, un programa que, gracias a Dios, ha tenido mucho éxito.
¡Hola! Ota-ola cumplió dos años en abril. Por entonces, más de 9 mil personas diarias veían el show. Un espacio de evidente polémica, el reino de Alex, donde los artistas y asociados se convierten en víctimas o en personalidades admiradas dependiendo de lo que escondan bajo los brazos…
—La gente viene al show por su éxito. Mucho público está viendo el programa todos los días. Quienes aceptan la entrevista se sienten tentados por promocionar su música y su carrera. Si yo fuera igual lo conflictivo que soy, pero solo tuviera cinco espectadores, nadie vendría al show.
Es por eso que Otaola siempre tiene una nueva víctima…
***
Pocos saben que Alex Otaola estrenó en Miami el monólogo Las penas saben nadar, de Abelardo Estorino. Quien busque un poco más, sabrá que su voz está en el personaje Kip Drordy de la serie animada South Park.
Quizá ni el mismo sepa que existe un instrumentista y compositor mexicano también llamado Alex Otaola.
Si entras a holaotaola.com puedes comprar souvenirs, gorras, pullovers con carteles: “PIN-GON pa’ to’ el mundo”, “LINDA TÚ?, LINDA YO!”; “HAY QUE JODERSE”.
Frases, turbantes, pulseras…
Me encanta Álex lo veo aún en quién tiene la razón programa que aún lo trasmiten en Colombia. Un hombre luchador con defectos y virtudes gran ser humano y gracioso tambien . Que Dios te bendiga y sigas cosechando éxitos. Un abrazo