En la Serie Nacional pasada, Rey Vicente Anglada, sumido en las carencias de un cuerpo de pitcheo endeble, tuvo de su lado una agradable sorpresa en la recta final del campeonato. En medio de un panorama caótico, en el que el staff monticular recibió sablazos de varios frentes, Rey y el cuerpo técnico, obligados por las circunstancias, necesitaron emplear como abridor a uno de sus mejores relevistas de la primera etapa. El desplazamiento tuvo buenas dosis de éxito, como lo atestiguan los números del derecho Yandi Molina.
Tras concluir la campaña, el marianense registró balance de seis triunfos —tres como iniciador—, dos derrotas y tres rescates, le batearon apenas .232 y su efectividad también fue aceptable, al dejarla en 3,53. En la actual justa, el cariz de Molina ha sido muy diferente, sin embargo, Anglada, bastante similar a lo ocurrido con Yandi en la Serie 58, recibió otra buena sorpresa desde el montículo, al mover a uno de sus efectivos del bullpen hacia el puesto de abridor.
Marcos Ortega, lanzador derecho, antes del actual campeonato, había trabajado en dos Series y sus 16 juegos lanzados fueron como relevista, rol que continuó en sus primeros encuentros de esta temporada. Hasta que un día, el 8 de septiembre, en el estadio Latinoamericano, recibió la encomienda de abrir por primera vez en Series Nacionales, contra un envalentonado conjunto de Matanzas que una jornada antes vio rota una cadena de ocho triunfos al hilo.
El pitcher de 21 años, sereno y controlado en sus envíos, caminó durante 6.1 innings, propinando tres ponches, regalando dos boletos y con solo par de imparables, los cuales, por cierto, los permitió en la séptima entrada. A partir de esa demostración convincente, Ortega se adueñó de un puesto en la rotación.
Hoy debe subir al montículo del Victoria de Girón para enfrentar a los locales matanceros, en lo que sería su debut en la segunda fase. Su actuación en este campeonato, sin contar el comodín, lo deja invicto en diez salidas —cinco como abridor—, con tres victorias, efectividad de 2.83, 16 boletos en 41.1 entradas y sus contrarios le promedian para pobre .189.
En la Serie Provincial habanera lanza con el elenco de Plaza de la Revolución, dirigido por Lázaro de la Torre, y acumula tres Series Nacionales Sub 23. Según datos brindados a nuestra revista por el estadístico Arnelio Álvarez, Marcos lanzó por primera vez en esa justa en 2017 y hasta el presente archiva 32 partidos, cinco como abridor, con cinco sonrisas e igual número de derrotas y cuatro rescates.
Un dato muy curioso es que el joven lanzador es hijo del otrora torpedero granmense Hermes Ortega, quien jugara durante 15 campañas con los Alazanes, bateando .264, con 125 dobles, 33 jonrones y 274 impulsadas. Precisamente contra Granma llegó la última victoria de Marcos, en el tercer choque del comodín que decretó el avance de los Leones a la segunda etapa. Se mantuvo durante 5.1 innings, con seis imparables, dos carreras limpias y par de ponches.
A continuación les brindamos los principales números de Marcos Ortega en sus tres primeras victorias en esta campaña, igualmente sus primeras de por vida.
Lunes 23 de septiembre, estadio Latinoamericano, vs. Holguín (5-1): ocho entradas, dos incogibles, una limpia, dos ponches y un boleto.
Sábado 28 de septiembre, estadio Augusto César Sandino, vs. Villa Clara (7-1): siete entradas, un imparable, una limpia, tres ponches y dos boletos.
Jueves 3 de octubre, estadio Cristóbal Labra, vs. Isla de la Juventud (6-2): 6.2 entradas, cinco imparables, dos limpias, cuatro ponches y seis boletos.
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